Jordi Cantillo, empresario y uno de los principales accionistas de la Real Sociedad a título individual (1,32% de los títulos), ha sido detenido por los Mossos d'Esquadra por presunta estafa y está a la espera de pasar a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Girona. Según la acusación, Cantillo podría haber solicitado créditos a nombre de sus trabajadores sin el consentimiento de éstos.

Según las mismas fuentes, la Policía catalana desconocería por el momento cuántas personas estarían afectadas, pero se calcula que podrían llegar al centenar. Presuntamente, se trataría de empleados y ex empleados de las empresas Anius Finanzas y Voices of Sifredus.

Cerca de una treintena de posibles afectados se habrían acercado en los últimos días a la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Girona para denunciar la situación. Es el caso de Sara Morabà a la que, según relataba a Efe, le habrían abierto varias cuentas corrientes en diferentes entidades bancarias, en las que también se habrían solicitado créditos sin su permiso.

«Habían abierto cuentas a mi nombre y a nombre de otra persona que yo no conocía de nada. Me enseñaron una fotocopia de mi DNI. Era una cuenta abierta vía on line y toda la tramitación estaba hecha en base a fotocopias a través de internet».

Tras recibir decenas de denuncias similares, los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación que, en la noche del miércoles, desembocó en la detención de Jordi Cantillo como presunto autor de un delito de estafa, aunque todavía se desconoce cuál sería su grado exacto de participación. De hecho, los Mossos, que siguen recibiendo denuncias, investigan si podría haber más implicados.

«Una venganza»

Jordi Cantillo aseguraba antes de ser detenido que el único problema que se había producido era un retraso en el pago de los salarios del mes de julio. Según recoge el periódico «El Punt», Cantillo admitió que ha tenido problemas en Anius Finanzas, pero no en Voices of Sifredus y que no entiende las denuncias. De hecho, apuntó a una posible venganza de sus empleados, ante las dificultades en el pago de salarios en Anius Finanzas por dos operaciones que habían salido mal. También afirmó que tenía los documentos en regla, pero que entraron a robar en un par de locales en Girona y se los llevaron.

Jordi Cantillo -que la pasada temporada también se relacionó con el Real Unión a través de la empresa Anius Finanzas como patrocinadora- es uno de los máximos accionistas a nivel individual de la Real Sociedad -aunque no ha tenido responsabilidades en su gestión- y siempre se ha mostrado muy activo en la reivindicación de los derechos de los pequeños accionistas de la entidad.

Es, de hecho, una de las cabezas visibles de «Plataforma 5%», que pretende pedir elecciones este otoño y que abandera la propuesta de «un accionista, un voto». Cuenta, de cara a conseguir este objetivo, con el apoyo de Iñaki Badiola -el ex presidente, de hecho, emitió ayer un comunicado en el que reclamaba el respeto a la presunción de inocencia del empresario-, pese a que, como sucede con la directiva actual, Cantillo mantuviera claras diferencias con él durante su mandato.