El amago de la subida de impuestos a las rentas altas desata la polémica
El ministro español de Fomento, José Blanco, reiteró ayer que, si para garantizar las políticas sociales y la inversión pública «es necesario» hacer pagar más a los que más tienen, él aboga por poner en práctica esa medida. PP, UPN y CiU rechazaron las intenciones del ministro, mientras que IU duda de que el Gobierno de Rodríguez Zapatero suba los impuestos a las rentas más altas, ya que, como recordó, durante los últimos años «ha hecho justo lo contrario».GARA |
Las declaraciones hechas por el ministro de Fomento del Gobierno español, José Blanco, el pasado miércoles en una entrevista radiofónica en la que reflexionaba sobre una hipotética subida del IRPF para las rentas más altas han desatado una nueva polémica política. Blanco afirmó que «si una familia tiene necesidades, el Estado debe ayudarla y, si para ello hay que elevar determinados tipos impositivos a las rentas más altas, se hará». Lo que ratificó ayer al decir que lo que quiere hacer el Ejecutivo es «impulsar la actividad económica y mantener la protección a las personas que tienen mas dificultades».
Las reacciones no han tardado en llegar. Por el PP, el ex ministro Cristóbal Montoro comentó que, cuando el Gobierno del PSOE habla de aumentar impuestos «siempre piensa en subirlos a las clases medias».
También Josep Sánchez Llibre, de CiU, criticó las palabras de Blanco y advirtió de que, si el Gobierno sube el IRPF, se puede olvidar de buscar el apoyo del la coalición catalana en futuros proyectos económicos que lleve al Congreso.
Por su parte, Álvaro Miranda, vicepresidente del Gobierno de Nafarroa, señaló que «subir impuestos es, en definitiva, quitarle el dinero a las familias para dárselo a la Administración». Denunció que ese planteamiento supone «demonizar» a determinados contribuyentes, en relación a quienes tienen ingresos más altos, «que contribuyen ya en su medida a las arcas públicas y no hay por qué cargar los efectos de la crisis sobre un determinado grupo de personas».
Tanto IUN como las Juventudes Socialistas de Nafarroa criticaron las declaraciones de Miranda. IUN señaló que «se debe abordar una reforma que sirva para recuperar la progresividad perdida en la última década, que los ricos paguen más impuestos». Frente al llamamiento de Miranda para no cargar las consecuencias de la crisis sobre un determinado grupo, IUN afirmó que el hecho de que el Gobierno foral «sea incapaz de reconocer» la necesidad de cambiar la política fiscal «no servirá sino para agravar la crisis y seguir descargando sus peores consecuencias sobre las espaldas de los trabajadores».
Las juventudes del PSN criticaron que «quienes causaron la situación de crisis ahora se resisten a tomar medidas para remediarlo y para evitar que las personas en peor situación económica tengan que padecer sus efectos» cuando «no han tenido ni arte ni parte».
NaBai también se pronunció sobre el tema y anunció su intención de activar una «mayoría parlamentaria progresista» con el objetivo de «recuperar una imposición a las rentas y patrimonios más privilegiados de esta comunidad».
Desde Madrid, Gaspar Llamazares, diputado de IU, dudó de la posibilidad de que el Ejecutivo del PSOE suba los impuestos a las rentas más altas, ya que «este Gobierno, a lo largo de los últimos años, ha hecho precisamente lo contrario». Señaló que si contara a día de hoy con los mismos impuestos que al inicio de la etapa del Gobierno de Zapatero, el Estado tendría «más de 20.000 millones de euros adicionales». Matizó que, en cambio, lo que ha hecho es «gravar, fundamentalmente mediante impuestos indirectos, a la gran mayoría frente a una minoría que es la que realmente tiene mayores rentas».
Con progresividad
Precisamente, las llamadas a «recuperar la progresividad en materia de impuestos indirectos» estaban en las bases de la convocatoria de huelga general convocada en Hego Euskal Herria el pasado 21 de mayo, al igual que la denuncia de las juventudes del PSN de que «pretenden socializar los gastos de la crisis económica mientras en momentos mejores privatizaron los beneficios de una expansión económica falseada y una especulación atroz cuyos efectos hoy todos padecemos».
En definitiva, críticas por un lado y llamamientos a un mayor nivel de solidaridad por otro, en medio de una situación tan complicada como es la del Estado español, con una de las tasas más altas de paro de la UE.
El vicepresidente y concejero de Economía del Gobierno de Nafarroa, Álvaro Miranda, comentó que no hay que cargar los efectos de la crisis «sobre un determinado grupo de personas».