Algunas predicciones a mediados de julio apuntaban a que para entonces ya habría hecho todo el calor posible del presente verano. Pero la realidad es que tanto julio como agosto se han presentado bastante cálidos y secos. Es más, apenas sí se contabilizan las habituales tormentas veraniegas, con pedrisco y alguna que otra inundación incluidas. Pero esa tónica parece que se romperá este martes, jornada para la que, sobre todo en Nafarroa e Ipar Euskal Herria se anuncia riesgo de fuertes tormentas, acompañadas del temido granizo.

Si hace sólo unos días, los termómetros en localidades como la alavesa de Laudio o la vizcaina de Sodupe -separadas por apenas 15 kilómetros- llegaban a alcanzar máximas oficiales de 40º, agosto se despidió ayer con temperaturas rozando esos dígitos. Tanto que Euskalmet estableció el nivel amarillo de alerta por calor, que fue comunicado a todos los ayuntamientos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

Se esperaban alcanzar los 38º de máxima, pero en torno a las 14.00 esos topes se situaban en los 37,5º en la estación meteorológica de Deustu, los 38,1º de nuevo en Sodupe, hasta los 36,7º se iba el mercurio en Laudio, por encima de los 36º llegaban en Orozko, Mungia, Oiartzun, Zarautz o Arrasate, y, el récord del día, si la información de la estación de Euskalmet era correcta, unos increíbles 42,1º a las 14.40 en Hondarribia. Desde luego, el viento sur que sopló durante la mañana ayudó a que el calor fuera más sofocante.

Por lo que respecta a Nafarroa, las temperaturas eran algo más moderadas ayer, marcando como máxima 35,3º en Doneztebe o 34,2º en la capital Iruñea. En la mayoría de puntos el termómetro no superó en las horas centrales del día los 30º.

Alerta de tormenta en Nafarroa

Sin embargo, el agobiante calor de la jornada matutina se tornó en una bajada de temperaturas y un cambio en la dirección del viento -noroeste- sobre las 16.30, que se tradujo en un aumento del viento en el litoral y la alerta de Euskalmet ante posibles galernas. Para anoche se esperan ya tormentas fuertes en Nafarroa, y es que este martes la situación empeora allí.

La Agencia Navarra de Emergencias activó ayer la alerta naranja por fuertes lluvias y tormentas en la zona del Pirineo, que podrían alcanzar hasta los 30 litros por metro cuadrado. Unas lluvias que pueden venir acompañadas de granizo y rachas fuertes de viento.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) esperaba ayer que lo peor se produjera desde el mediodía hasta primeras horas de la noche de hoy.

Pero tampoco la zona centro navarra y la vertiente cantábrica del territorio se librará de las lluvias, aunque las precipitaciones previstas pueden ser de hasta 20 litros por metro cuadrado.

Así las cosas, Emergencias de Nafarroa aconseja evitar este martes las salidas montañeras, lo mismo que mantenerse alejado de lugares que puedan convertirse en atracción de rayos. Y en caso de inundaciones, evitar atravesar un área en el que la altura del agua supera el eje de las ruedas.

De momento, los pronósticos apuntan a que este tiempo inestable permanecerá así hasta que llegue el fin de semana, cuando el sol volverá a lucir más que las nubes.