La Diputación de Gipuzkoa prevé endeudarse el próximo año en 100 millones de euros «o más» para poder afrontar las inversiones, al menos 27 millones más que este año, según anunció ayer su portavoz, Eneko Goia. En rueda de prensa, Goia anunció que la institución guipuzcoana ha iniciado ya el diseño de un plan anticrisis cuyo objetivo «prioritario» es la elaboración de los presupuestos de 2010, aunque también incluirá medidas e inversiones que tendrán repercusión durante los próximos años.

Aunque todavía no se han perfilado los contenidos ni concretado las cifras de este proyecto, la Diputación contemplaría recurrir a una deuda de al menos cien millones de euros para cubrir sus inversiones, frente al endeudamiento de 73,1 millones registrado en 2009, avanzó el portavoz, quien reconoció, asimismo, que la caída de la recaudación en el herrialde, que se ha desplomado un 24,4% con respecto a 2008 en los siete primeros meses del año, es un dato «duro» para la Diputación ya que supone una bajada «importante». Sin embargo se mostró «convencido» de que la institución guipuzcoana puede hacer frente a esta situación.

Goia insistió, en este sentido, que estos resultados hacen que el plan anticrisis sea «más necesario que nunca», y valoró que para poder llevarlo a cabo es necesario recurrir a un nivel de endeudamiento que calificó de «importante».

Nuevas medidas fiscales

El portavoz señaló además que para combatir los efectos de la crisis económica es imprescindible buscar un acuerdo institucional y adoptar «nuevas medidas fiscales más oportunas», un asunto que, según indicó, «todavía está en estudio».

A este respecto, anunció que el consejo de la institución guipuzcoana, que se celebrará el próximo día 15, aprobará este nuevo plan contra la crisis, que se basará en adelantar las obras públicas, financiar a empresas de innovación, ayudar a la inserción laboral e invertir en ciencia y tecnología. Goia concretó que este paquete de medidas podrá aplicarse en un «contexto de colaboración con el conjunto de las instituciones» y a través de Gipuzkoa Aurrera, el grupo formado por la Diputación, Kutxa, Adegi, la Cámara y el grupo Mondragón para impulsar proyectos estratégicos.