El Aviron logró un punto bonus que sabe a gloria. Los de Baiona jugaban ante uno de los candidatos para ganar la Liga. El campo era muy complicado, pero los vascos volvieron a ofrecer su mejor cara. Sumaron un punto muy bueno y a punto estuvieron de lograr algo más.

Tras una semana marcada por la gripe A, el Aviron vuelve a recuperarse y volvió a demostrar que habrá que contar con ellos. El Stade saltó a la cancha con la intención de sentenciar el duelo cuanto antes, pero los labortanos presionaron arriba y nunca dejaron jugar a los de Toulouse.

El Aviron siguió con su juego y empezaron a dominar a su rival y también el marcador y llegaron al descanso 6-14 por delante en el luminoso. La victoria estaba más cerca que nunca, pero en frente había un gran equipo. En la segunda parte, el Stade se fue arriba, no quería sorpresas y eso obligó al Aviron a defender más atrás. Los franceses dominaban y los vascos querían pero no podían aguantar las embestidas de los locales y, a falta de ocho minutos para el final, el Stade daba la vuelta al marcador.

Habían hecho lo más difícil y bajaron el ritmo de juego y los blanquiazules volvieron a mandar en el juego. Un golpe de castigo de Bernard volvía a dejar al Aviron a un ensayo de la victoria y lo intentaron, pero los franceses aguantaron en los minutos finales y los vascos acabaron sumando un punto, que podían haber sido cuatro.