Con un circuito final complicado, la sexta etapa de la Vuelta prometía movimiento. No fallaron los augurios, pero sí las quinielas. Ni André Greipel, ni sus compañeros -hay que irse hasta el noveno puesto para encontrar al primer corredor de Columbia, toda una novedad-, ni Boonen, ni Bennati, que podían haber optado al liderato. La victoria en Xátiva fue para Borut Bozic (Vacansoleil). Corredor y equipo humildes que justifican de sobra su presencia en la prueba; por el triunfo y por haberlo conseguido en un terreno que parecía monopolizado por los Columbia.

Un equipo al que la jornada tampoco le resultó totalmente negativa. Pese a que apenas pudo disputar el sprint -fue décimo-, André Greipel mantiene el maillot dorado que sí perderá hoy cuando, posiblemente, regrese a las espaldas de Fabian Cancellara. El que sí se perdió el protocolo del podio esta vez fue Aitor Hernández, que perdió el maillot morado en favor de otro aventurero.

Concretamente del Malagueta, que se marchó a las primeras de cambio junto a Bingen Fernández, Aitor Pérez Arrieta y Matheus Pronk. Cabalgaron en cabeza durante casi toda la jornada, con ventajas máximas superiores a los seis minutos y con el corredor de Andalucía puntuando en todos los puertos de la jornada. Fue el único del cuarteto que obtuvo premio, con el liderato de la montaña, después de que la maquinaria de Columbia echara abajo su aventura.

El trabajo de los norteamericanos, sin embargo, se topó con un circuito final de lo más pestoso. Y con mucho peso pesado con ganas de probar. Lo hicieron Alessandro Ballan, Mati Breschel, David de la Fuente, Philippe Gilbert y David Moncoutié, aunque corrieron la misma fortuna que sus predecesores.

Otro contratiempo, sin embargo, entorpecería los planes de Columbia. La dureza del último tramo apartó a André Greipel de la cabeza, sus compañeros no encontraron alternativa y, en medio del consiguiente descontrol, Borut Bozic arrancó con una potencia espectacular. El esloveno sprintó durante 400 metros para apuntarse su quinto y mejor triunfo del año.

Hoy cederá el testigo a otros especialistas. También a los favoritos al triunfo final -los Schleck y Vinokourov cedieron algunos segundos ayer-, que deben empezar a mostrar sus cartas definitivamente, en los treinta kilómetros contrarreloj con salida y llegada en Valencia.