La jueza ha sobreseído la denuncia de Euskotren contra Eliseo Gil por el caso Iruña Veleia
GARA | GASTEIZ
La contundencia con la que se declaró culpable de fraude al equipo de Lurmen, que gestionaba las excavaciones del yacimiento romano de Iruña Veleia, va perdiendo peso. La razón ahora llega desde el Juzgado de Instrucción de Gasteiz, ya que su titular ha decidido que no hay delito en los trabajos que el anterior director, Eliseo Gil, llevó a cabo para Euskotren. Esta decisión está en consonancia con la postura que mostró la Fiscalía. Los argumentos de ambos se basan en que el convenio que Gil y la empresa Euskotren firmaron para que ésta se convirtiera en patrocinadora del yacimiento, fue firmado cuatro años antes de que se produjeran los hallazgos, -que en su día fueron calificados de excepcionales y que una Comisión de Expertos encargada por la Diputación concluyó después que eran falsos-.
De hecho, el acuerdo está fechado en 2001 y no fue hasta 2006 cuando se presentaron en público los grafitos con inscripciones que revolucionaban la historia del euskara y de la religión católica. El segundo argumento de la jueza, y también de la Fiscalía, es que el dinero con el que Euskotren financiaba la excavación no se vio aumentado después de ese momento.
El camino en los juzgados aún es largo. Ésta es tan sólo una de las tres causas a las que tiene que hacer frente Eliseo Gil. La segunda denuncia también está interpuesta por Euskotren y sólo están divididas por que la empresa repartió su patrocinio. Por lo tanto, el sobreseimiento de esta segunda denuncia no sería sorprendente. Diferente puede ser el camino que siga la interpuesta por la Diputación que acusa a Lurmen de fraude arqueológico y no económico como el caso de Euskotren.