ELA denunció ayer que la privatización del albergue de Plentzia afectará a cerca de cuarenta empleos. La Diputación de Bizkaia cerrará temporalmente la residencia por obras de remodelación para luego ser explotada por empresas privadas. ELA anunció que, una vez conocidas las intenciones de Diputación por parte de los trabajadores, estos comenzaron una serie de acciones para «hacer reflexionar a la administración». Entre las distintas movilizaciones que se pusieron en marcha, una de ellas fue recabar el apoyo de los distintos grupos junteros de Bizkaia.

Desde el sindicato aseguraron que con esta privatización ya no quedará «ningún centro con gestión pública que garantice un servicio de calidad», lo que es, a juicio de ELA, «lamentable» y una pérdida de actividad pública.