Batalla legal
Mikel Astarloza no se rinde
El corredor pasaitarra, que cuenta con el apoyo de su equipo, insiste en su inocencia pese al resultado del contraanálisis. El ciclista de Euskaltel-Euskadi asegura preferir la sanción, que se vería reducida en caso de confesión, a reconocer algo que no ha hecho.
Amaia U. LASAGABASTER | BILBO
Mikel Astarloza no se rinde. Parafraseando al Ché, prefiere hacer frente a las consecuencias de una injusticia, que agachar la cabeza. Pese a que el contraanálisis, cuyo resultado se hizo oficial el miércoles, ofreció un resultado similar al de la primera muestra, por el que el corredor se habría dopado con EPO recombinada, el pasaitarra insiste en su inocencia y se muestra dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias -en un camino en el que estará acompañado por Euskatel-Euskadi- para demostrarlo.
Astarloza, de hecho, aseguró en un comunicado hecho público ayer, que prefiere cumplir los dos años de sanción a los que en principio será condenado -y que se verían reducidos en caso de confesión- a reconocer una falta que no ha cometido. El guipuzcoano, además, está convencido de que conseguirá probar su inocencia y asegura que su vida deportiva no ha acabado.
«Desde hace varios días, mis abogados y los del equipo llevan una línea de trabajo encaminada a aclarar lo sucedido, que al parecer va por buen camino para demostrar mi inocencia e intentar limpiar mi imagen», dice Astarloza, que se compromete a comunicar públicamente los estudios y análisis del equipo que trabaja en su defensa, «una vez sean firmes y objetivos, cosa que espero hacer en el menor plazo de tiempo posible».
El corredor, por otra parte, destaca el hecho de que Euskaltel siga apoyándole pese al resultado del contraanálisis, una circunstancia que confirmaría no sólo los resultados positivos de las pesquisas internas, sino la confianza absoluta que tiene en su conducta. «Por otro lado el equipo -añadió a este respecto-, primero porque me cree como persona, y segundo porque los estudios llevados a cabo hasta ahora así lo avalan, me acaba de comunicar, al igual que lo hizo ayer por medio de la prensa, que siguen creyendo en mi inocencia, lo cual demuestra que no estoy sólo en esta batalla».
De ahí que, aún siendo «consciente de que puedo tener una sanción de dos años», Astarloza se vea fortalecido en su intención de luchar. «En caso de reconocer haberme dopado, me reducirían la sanción a un año, pero nunca reconoceré un delito que no he cometido. Mi palabra no tiene precio. Prefiero estar castigado durante dos años a reconocer algo que no he hecho», subrayó, al tiempo que aseguraba que «mi vida deportiva no ha finalizado, volveré lo antes posible. También manifiesto que, pase lo que pase con mi sanción, mi intención es finalizar mi carrera deportiva encima de una bicicleta», concluyó el corredor, no sin antes mostrar su «agradecimiento» a las «innumerables» personas que le vienen mostrando su apoyo. «No les defraudaré», insistió.
Apoyo
Empezando por su equipo, un Euskaltel-Euskadi que, en cuanto se hizo oficial el resultado positivo -o «no negativo», siguiendo la jerga- del contraanálisis, ratificó de manera pública su apoyo al corredor, en cuya defensa seguirá trabajando.
En el equipo se reconoce que habrá que cumplir la normativa vigente al respecto, por lo que, salvo sorpresa, el contrato del corredor será rescindido, pero seguirán trabajando para limpiar la imagen de equipo y corredor, sin temor a que esa defensa pueda acarrear algún tipo de represalia.
Lo cierto es que Astarloza y Euskaltel pueden sentirse más solos que nunca en esta batalla, teniendo en cuenta que esas irregularidades a las que se han aludido desde un principio les enfrentarían al Laboratorio de Madrid. No cabe duda de que, desde instancias oficiales y entorno mediático vario, se cerrarán filas en torno a éste, sobre todo tras el puyazo que acaba de recibir por parte del COI el plan de lucha antidopaje de Madrid, cuya cartelera encabeza el susodicho laboratorio, en sus aspiraciones a organizar los Juegos Olímpicos de 2016. El director de la Agencia Estatal Antidopaje Francisco Javier Martín del Burgo se vanagloriaba recientemente, tras conocerse esa valoración negativa del COI, de que de los 34 laboratorios antidopaje internacionales homologados, «el de Madrid y el de Paris son los que detectan mayor número de casos positivos, algo que es significativo».
Tampoco los diferentes organismos que rigen el ciclismo, y el deporte en general, se han caracterizado por su propensión a reconocer errores. Mikel Astarloza espera inscribir su nombre en esa exigua lista, aunque para conseguirlo tendrá que hacer frente a un largo proceso cuyo siguiente paso le corresponde a la Federación Española, que sancionará al corredor en cuanto reciba la notificación de la UCI.