Al menos 13 personas murieron en distintos ataques llevados a cabo por rebeldes durante el pasado fin de semana en la región musulmana de Tailandia, según indicaron ayer desde fuentes oficiales.

Cinco soldados fallecieron en uno de estos ataques, una emboscada realizada el domingo por la noche por un grupo de ocho insurgentes armados con ametralladoras en las proximidades de una mezquita de Yala, capital de la provincia de mismo nombre y a unos 1.100 kilómetros al sur de Bangkok.

Ocho civiles

El día anterior, sábado, otras ocho personas, en este caso civiles, perdieron la vida en ataques en las provincias vecinas de Narathiwat y Pattani, según precisó un portavoz de la comisaría regional de la Policía. Además, explicó que una de las víctimas era un joven de 19 años, a quien los rebeldes degollaron.

El movimiento separatista islámico, que busca la creación de un Estado que integre las tres provincias que configuraron el sultanato de Pattani, reanudó la lucha armada en 2004, y desde entonces han muerto cerca de 3.700 personas.