Merkel y Steinmeier se presentan más como dueto que en un duelo
Ingrid HAACK |
La canciller alemana, Angela Merkel, y su principal contrincante en las elecciones generales del 27 de setiembre, el vicecanciller, Frank-Walter Steinmeier, se presentaron el domingo en su primer y único debate televisivo más como dueto que en un duelo, con diferencias de matiz más que de raíz.
El enfrentamiento, de acento marcadamente económico, transcurrió en un tono civilizado y hasta distendido, con pocos momentos de controversia.
«Hemos trabajado bien, y algunas cosas posiblemente sólo las conseguimos llevar a cabo porque gobernamos en gran coalición», dijo Steinmeier al abrir el debate. En términos similares se manifestó Merkel, quien matizó que el buen trabajo se hizo bajo su liderazgo y no del socio socialdemócrata.
Ambos, sin embargo, subrayaron que la gran coalición no es una elección deseada sino «el resultado del voto popular» y debe ser la «excepción y no la regla en una democracia».
Coaliciones
Steinmeier hizo hincapié en que el buen trabajo de la canciller sólo fue posible gracias a la seña de identidad socialdemócrata impuesta por su partido, y advirtió contra el giro mercantilista que po- dría dar la Unión Cristianodemócrata (CDU) si finalmente coaliga con los liberales del FDP.
Aunque al comienzo Merkel evitó todo guiño hacia una coalición en concreto, al final buscó la distancia hacia el SPD, al explicar que veía más puntos en común con el FDP y mejores posibilidades de lograr crecimiento económico e innovación tecnológica que con su aliado actual.
Los puntos en común quedaron reflejados en la defensa de la venta de Opel a Magna y en la decisión de aumentar el déficit como instrumento para salir de la crisis.Las diferencias de matiz quedaron patentes en los dos puntos de disenso tradicionales: la propuesta socialdemócrata de introducir un salario mínimo, que Merkel rechaza, y el futuro de la energía nuclear.