Alrededor de 200 personas se reunieron ayer en el monolito de Besaide donde rindieron homenaje a los montañeros fallecidos este año. Los organizadores informaron a GARA de que muchos de los participantes fueron identificados y retenidos en los controles que la Guardia Civil situó en los alrededores de Besaide.

En el mismo monolito se llevó a cabo una misa y un poco después un acto pagano en el que, según apuntaron, quemaron incienso para «expulsar a los malos espíritus» del lugar, en alusión a los líderes del PSE que en plena campaña electoral posaron ante los medios de comunicación en el mismo monolito.

La canción «Lilurarik ez» de Mikel Laboa también fue entonada por los asistentes en recuerdo a los montañeros fallecidos durante este año y con un sonoro irrintzi pusieron punto y final a este acto anual.