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Sitges inquieta con un motín carcelario y la adopción de una niña rusa de orfanato

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Presentada en una de las sesiones especiales del Festival de Sitges, «Celda 211» es la nueva película de Daniel Monzón, un emocionante thriller carcelario con un imponente Luis Tosar en el papel de Malamadre y el descubrimiento como actor del celuloide del joven Alberto Ammann.

La película cuenta las peripecias de los amotinados de una cárcel, con el preso Malamadre al frente, y de un funcionario en su primer día de trabajo que, para sobrevivir al motín, se hará pasar por lo que no es. El director Monzón, que trata de hacer siempre «lo que le emociona» ha construido, con un guión de Jorge Guerricaecheverría y a partir de una novela con el mismo título de Francisco Pérez Gandul, una película coral, con mucha acción e inesperados giros.

Daniel Monzón, que antes de dirigir fue crítico, se dio a conocer en el año 2000 con «El corazón del guerrero» y, posteriormente, rodó «El robo más grande jamás contado» y «La caja Kovak».

Niños de terror

Por su parte, el director catalán afincado en Hollywood Jaume Collet-Serra llevó al Festival de Cine de Sitges «La huérfana», una vuelta de tuerca al cine de terror con niños, que supone el debut en la interpretación de la joven actriz Isabelle Fuhrman.

En el filme, una familia que acaba de perder un hijo decide adoptar a una niña rusa (Fuhrman) en un orfanato local. Sin embargo, la tranquilidad de la casa se ve rápidamente trastocada ante el extraño comportamiento de la recién llegada con sus nuevos padres y hermanos.

Collet-Serra aseguró que pese a que sus dos largos se acercan al cine de género, no se considera un cineasta de terror. No en vano, su próximo trabajo es un thriller protagonizado por Liam Nesson.

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