El movimiento pro-amnistía convocó ayer a los medios de comunicación en Gasteiz para dar cuenta de que en tan sólo un mes casi veinte jóvenes han sido citados, juzgados o llevados a la Audiencia Nacional española. En setiembre las actuaciones de este tribunal especial se han cebado especialmente en la juventud de esta ciudad. Pero los motivos han sido de lo más diverso. Algunos de ellos han recibido citaciones para declarar como imputados en los casos de Gaztesarea o D3M; otros han sido juzgados por diferentes causas; y algunos van a ser sentados ahora en el banquillo por sabotajes ocurridos hace siete años.

Miembros del movimiento pro-amnistía ampliaron el foco para recordar que en los últimos meses «hemos sido testigos de una represión sin límites» y recalcar que el objetivo es arrasar con todo aquello que tenga que ver con cualquier reivindicación democrática para Euskal Herria.

Los casos de secuestro y tortura denunciados por Juan Mari Mujika, Lander Fernández y Alain Berastegi, o los últimos casos de petición de colaboración revelados por el iruindarra Dani Saralegi y los gasteiztarras Imanol Pancorbo y Saioa Zerain, evidencian en su opinión que «el Gobierno español, con la necesaria colaboración del francés, ha optado por abrir una nueva etapa de guerra sucia», con la desaparición de Jon Anza como ejemplo más crudo. Pero recordaron también acciones fascistas como las reivindicadas por Falange y Tradición, que se «repiten con total impunidad», y cuyo penúltimo exponente son las pintadas que el pasado martes aparecieron en el Gaztetxe de Gasteiz.

«Legalidad a su medida»

Los comparecientes recordaron que se reprime, detiene y golpea a todas aquellas personas solidarias con las y los presos políticos vascos, y que además se están reproduciendo las agresiones a los presos políticos vascos, que siguen manteniendo encarcelados a los gravemente enfermos y que cada vez son más los que siguen privados de libertad aun habiendo cumplido íntegramente la condena impuesta. «Pretenden aniquilar la solidaridad masiva que defiende los derechos de este colectivo», subrayaron en el mensaje dado a conocer ayer.

Denunciaron que para todo ello se está manejando a su antojo la Audiencia Nacional, «un instrumento creado para llevar a cabo una estrategia que destruya la lucha» por la democracia y la libertad en Euskal Herria. Señalaron que el tribunal especial es quien «garantiza que la apuesta de guerra del Gobierno español se lleve a cabo bajo una cobertura legal». En definitiva, hablan de «una legalidad construida a su medida».

Desde el movimiento pro-amnistía no niegan la preocupación que esta situación está creando, no sólo en Gasteiz lógicamente, sino en el conjunto de Euskal Herria. No en vano, para este movimiento la represión ha sido siempre «una razón por la que luchar y solidarizarse» con todas aquellas personas presas y represaliadas a las que anuncian que «nunca jamás» dejarán de apoyar.

«No dejaremos de repetir que la solución nunca será la represión» insistieron los comparecientes, que mostraron el cartel de la manifestación del viernes y fotos de los gasteiztarras presos. La manifestación no sólo será una denuncia de estos casos, sino una apuesta por la solución a través de «las vías democráticas». Dirigieron su llamamiento a todos los gasteiztarras, a quienes emplazaron a salir a la calle «por encima de todas las dificultades impuestas». La movilización ha sido convocada este viernes a partir de las 20.30 horas desde la Plaza de la Virgen Blanca.