Haimar Zubeldia espera que en el plazo de una semana el equipo Astana le dé la carta de libertad que le permita firmar por Radio Shack para las dos próximas temporadas. Johan Bruyneel, manager actual de Astana y en el futuro del nuevo equipo de Armstrong, es el que negocia con la Federación Kazaja la carta de libertad de los cuatro corredores que están en la situación del usurbildarra y espera que no haya problemas a diferencia de lo que sucede con Contador, al que le quieren obligar a cumplir el año que le queda de contrato.

Estos días se ha publicado la lista de 23 corredores que estarían en el Radio Shack, de los que once son la base del Astana: Armstrong, Brajkovic, Horner, Klöden, Leipheimer, Paulinho, Popovych, Rast, Rubiera,Vaitkus y Zubeldia. Además llegarían Steegmans y Rovny (Katusha), Rosseler (Quick Step), Hermans (Topsport), Bewley y Selander (Trek Livestrong), Machado (Madeinox), Lequatre (Agritubel), Busche (Kelly), Impey (Barloworld) y el oñatiarra Markel Irizar procedente de Euskaltel.

A pesar de la publicidad de esta lista, Zubeldia recordaba ayer a GARA que «aún tengo un año de contrato, pero pienso que todo saldrá bien porque sé lo que quiero y casi todo lo demás lo tengo hablado. Pero necesito esa confirmación de la salida de Astana antes del día 15, en una semana se sabrá más porque está un poco en el aire. Johan está negociando estas cosas. Quiere contar conmigo y con otros tres corredores con contrato».

Diferencia con Contador

Zubeldia espera que Astana acceda a romper su contrato a diferencia de lo que sucede con Contador, al que ha comunicado que cumplirá el año que le queda pese a su deseo de irse. El usurbildarra entiende «a las dos partes. Alberto se querrá rodear de un buen equipo y ve que muchos corredores se quieren ir y entiendo a la parte kazaja porque si tienes al número 1 en tu equipo intentas mantenerle como sea, aunque como amigo de Alberto me gustaría que estuviera donde quisiera».

Zubeldia prefiere ir con Bruyneel y Armstrong que seguir con Astana porque «he estado contento con el equipo y la mayoría del staff se marcha a Radio Shack. Estoy contento con ellos, me han trasmitido su confianza y tengo claro lo que quiero. He vuelto a disfrutar del ciclismo, he estado a gusto con el trabajo que he hecho y encima he visto que me lo han agradecido».

Porque no sólo se irán los corredores y los directores, casi todos los auxiliares han recibido la invitación de Bruyneel de seguir con él y casi tendrá la misma estructura que en Astana.

A la espera de una llamada de Bruyneel, Zubeldia está de vacaciones tras acabar en la Vuelta una temporada de la que hace un balance positivo porque «he cumplido, sobre todo en el Tour, en el que salió todo bien. Ganamos la carrera, por equipos, la crono colectiva y me queda para siempre el recuerdo de entrar a París en la última etapa tirando con el equipo del vencedor».

De cara al futuro agradece el fichaje de Markel Irizar desde el Euskaltel «porque para los viajes, para entrenar y para todo siempre es mejor tener una persona de tu alrededor».