LAGUN ONAK 1

ALCORCÓN 2

El Lagun Onak fue víctima de un Alcorcón herido en su orgullo, ya que los madrileños aún recordaban que hace varios meses otro conjunto guipuzcoano, el Real Unión, les eliminó en la fase de ascenso a Segunda División.

De esta manera, los azpeitiarras se quedaron sin el premio de poder enfrentarse a un equipo de Primera tras la excelente campaña que realizaron la temporada pasada en Tercera -quedaron líderes empatados a puntos con el Amurrio-.

No obstante, los jugadores dirigidos por Aitor Zulaika pueden estar muy satisfechos, ya que realizaron un meritorio encuentro ante una fiel afición que se volcó con su equipo hasta el pitido final.

La grada principal se llenó al completo y la zona que rodea al terreno de juego fue cubierto por centenares de personas. Caras conocidas del mundo del deporte tampoco quisieron perderse el choque, y entre el público se pudo ver, entre otros, al presidente de la Real, Jokin Aperribay, al director deportivo del Real Unión y a su ayudante, Roberto López Ufarte e Iñaki Berruet, e incluso al colegiado Pérez Lasa.

Gracias a ese empuje de la afición llegó el primer gol local. El colegiado señaló mano dentro del área visitante tras un centro de Altolagirre por la izquierda. Bastida no desaprovechó la oportunidad y transformó la pena máxima para colocar el 1-0 en el marcador.

Las gradas se venían abajo en ese momento, pero aún quedaba un largo recorrido para lograr el objetivo de la victoria. El Alcorcón adelantó líneas y comenzó a crear peligro en el área local.

Antes del gol del Lagun Onak, el guardameta guipuzcoano Imanol, que ha crecido como futbolista en el Antioguoko y ha militado, entre otros equipos, en el Eibar B -también formó parte de la plantilla del primer equipo-, sacó una mano providencial ante un delantero del Alcorcón que le estaba encarando dentro del área.

Acto seguido del primer tanto del encuentro, Altolagirre dispuso de una buena ocasión para marcar, pero el guardameta rival Juanma detuvo bien el esférico.

Demasiada generosidad

Pero esto del fútbol muchas veces suele ser demasiado injusto. De lo que podía haber sido el 2-0, un marcador excelente para irse al descanso, se pasó al empate a uno. El Lagun no aprovechó una ocasión clara delante del guardameta rival en un error clarísimo de un defensa visitante, que perdió el balón en el peor lugar y en el momento menos oportuno.

Arrue pecó de generosidad delante del portero al querer ceder el balón a un compañero que se aproximaba por la izquierda, pero el esférico fue interceptado por un defensa rival. Minutos más tarde, el Alcorcón sacaba petróleo al saque de un córner después de una polémica falta.

A partir de ahí, los madrileños se hicieron con el control del encuentro. Creaban peligro en el área local, pero una vez más Imanol realizaba una excelente parada en un lanzamiento desde fuera del área, mandando el balón a córner.

Todo hacía indicar que el empate iba perdurar hasta el descanso, pero no fue así, ya que en la siguiente jugada los madrileños aprovechaban un balón por alto para marcar el segundo tanto, que fue obra del mediapunta Borja.

En la reanudación, los jugadores del Alcorcón tomaron el mando, como si quisiesen demostrar qué conjunto de los dos era de una categoría superior. Tanto dominaban, que en el minuto 57 lograron el segundo gol, el que a la postre les daría el triunfo para pasar de ronda y poder medirse con un equipo de Primera División -el sorteo se celebrará mañana-. El centrocampista Mora marcó un golazo por la escuadra con su pierna derecha y desde fuera del área.

Como suele ser costumbre en estos casos, y más jugando fuera de casa y a un solo encuentro, los madrileños se echaron atrás, llegando incluso a encerrarse y utilizar el contraataque como único recurso de poder distanciarse más en el marcador.

El Lagun, con un Aranburu muy participativo en los minutos finales, supo interpretar la jugada del Alcorcón. Los guipuzcoanos comenzaron a tocar el balón, pero ni el gol ni las ocasiones claras llegaban, hasta que el reloj marcó el minuto 94 y el colegiado dio por finalizado el encuentro, rompiendo el sueño azpeitiarra de poder jugar contra un equipo de la máxima categoría, algo que sería histórico para el club y para el pueblo en general.