Alonso aplaude el apoyo del PSN a UPN y dice que buscan «la estabilidad de Navarra»
En plena resaca de su decisión de romper los pactos municipales con Nafarroa Bai, el PSN celebró ayer en Milagro el Día de la Rosa, con presencia estelar del jefe del PSOE en el Congreso. José Antonio Alonso dijo que apoyan a UPN «por la estabilidad y el bienestar».
GARA |
El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, fue el protagonista de la fiesta anual del PSN. Apenas unos días después de la ruptura de los pactos con Nafarroa Bai, Alonso no ocultó el acercamiento de su partido a UPN, pero dijo que lo hacen «por la estabilidad y por el bienestar de Navarra».
Tras admitir que «el PSN está apoyando un proyecto político con el que tiene claras diferencias ideológicas y políticas», recalcó que ésta es la línea correcta a seguir y marcó el nuevo terreno de negociación bilateral. El PSN aprobará los presupuestos del Gobierno de Miguel Sanz por tercera vez consecutiva, pero a cambio quiere que UPN dé su aval a las cuentas del Ejecutivo de Zapatero, al que no le sobran los apoyos precisamente.
Miguel Sanz ya se ha mostrado abierto a ello, aunque falta por oír la voz de la presidenta de UPN, Yolanda Barcina. La ruptura del pacto entre UPN y PP facilita esta opción; de hecho, hace un año los dos diputados navarros ya se abstuvieron, en un momento que marcó la ruptura del pacto de 1991.
José Antonio Alonso destacó, en su visita a Milagro, que «esperamos una contrapartida. Es una relación simétrica elemental. La misma buena fe y la misma actitud positiva que nosotros mantenemos en Navarra, que la mantenga UPN en Madrid, también en el tema de los presupuestos», pidió el jefe del grupo del PSOE.
También se lo piden a NaBai
Alonso también quiso pedir el apoyo a los presupuestos estatales a la diputada de Nafarroa Bai, Uxue Barkos, curiosamente al mismo tiempo que el secretario general del PSN, Roberto Jiménez, criticaba a la coalición. Jiménez volvió a imputar a NaBai «radicalismo» e insistió en presentar la ruptura del pacto municipal como algo imposible de evitar. Insistió además en su argumento habitual de que es incompatible ser abertzale y ser de izquierdas. «El nacionalismo no es de izquierdas, es otra cosa», declaró.
En su discurso ante la afiliación del PSN, el líder del partido criticó a UPN, al que sin embargo apoyan de forma férrea y estable. Jiménez aseguró que el PSN es la única «alternativa» al Gobierno de Sanz desde posiciones de izquierda, pero matizó que en esta situación económica debe comportarse con responsabilidad.
Mirando ya a las urnas, el PSN pone su mirada en lo que Jiménez llamó «sindicatos de clase», en alusión a UGT y CCOO. El líder del PSN pidió su ayuda para conformar un «bloque de izquierdas» en el que no quiere abertzales.
