Los números se pueden equiparar a la 2001-2002
El pasado reciente relativiza este buen comienzo liguero
La temporada pasada y la última de Aguirre marcan el peor y el mejor inicio de los últimos tiempos.
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Podía haber sido mejor de no ser por el infantil error de última hora que cometieron guardameta y centrales rojillos en el descuento de El Sardinero. Casi cumplido el primer cuarto liguero y pendientes de la visita del líder, Osasuna rubrica un inicio de competición que le ha llevado a estar en la parte templada de la tabla.
Una ubicación que se podría calificar como meritoria a tenor de lo sucedido en las dos últimas campañas, pero que hay que relativizarla si nos atenemos a los comienzos protagonizados por la escuadra navarra durante su más reciente etapa en Primera a lo largo de la presente década.
Que nadie empiece a echar las cuentas de la lechera porque los números conseguidos hasta ahora no tienen mayor valor que el de que mantienen la media de puntuación necesaria para alcanzar la tan ansiada cifra de los 42. De hecho, esta temporada es un calco de la 2001-2002 -la última de Lotina- y por aquel entonces el equipo no estuvo exento de problemas de última hora para mantenerse en la máxima categoría.
Claro que si equiparamos el bagaje actual con el que se llevaba el año pasado a estas alturas, cuando apenas se habían sumado cuatro raquíticos puntos, la comparación es ciertamente odiosa. Osasuna estaba tocando fondo y dejando su estadística histórica a la altura del barro, con guarismo sólo equiparables a la primera campaña de Javier Aguirre en Iruñea.
Como no podía ser de otra manera, el técnico mexicano, y en contraposición a sus complicados inicios al frente del conjunto rojillo, también puede alardear de buenos números en el primer tramo liguero de sus tres siguientes temporadas, sin olvidarnos que en la última consiguió el boleto para jugar la previa de Champions y la temporada anterior, la final copera.
Por fin, un bloque
Gran parte del actual éxito contenido radica en que después del desarme del grupo que consiguió los anteriores logros citados, por fin se vuelve a conformar un bloque con garantías. La mayoría de los jugadores que componen el once tipo conformado por Camacho son hombres que ya llevan varios años de experiencia acumulada en Primera y quienes se han incorporado en la presente, caso de Camuñas y Aranda, también tienen unas cuantas horas de vuelo en la élite futbolística.
No en vano, canteranos como Azpilicueta y Monreal tienen el reto de que ésta sea la campaña de su definitivo despegue, hay otros que se han ganado un peso específico en el campo acumulando muchos minutos -hablamos de Flaño, Juanfran o Nekounam, por ejemplo- y del resto cabe esperar su granito de arena en forma de experiencia, que es el caso de Ricardo, Puñal, Josetxo o Pandiani.
Como cabía prever, el técnico rojillo, José Antonio Camacho, realizará un buen número de cambios -seis o siete, indicó- en el once inicial que se medirá al Xerez, aunque en la convocatoria entraron hasta siete de sus hombres titulares. Así, avanzó que Oier jugará de inicio -habrá que ver si en el lateral o en el carril, dependiendo de si lo hace Azpilicueta o Juanfran-, lo mismo que Rúper y Vadocz, en el doble pivote. Además, Calleja lo hará como volante zurdo y Galán tendrá otra oportunidad para demostrar su talento. A última hora, se sumaron a la convocatoria Portillo y el jugador del filial Alan Baró.N.M.
Carlos Aranda apenas se ejercitó en el entreno matinal de ayer, ya que sufre una sobrecarga en los isquiotibiales de su pierna derecha. El delantero malagueño tuvo que retirarse en el transcurso de la segunda parte del encuentro frente al Racing precisamente por este motivo.
El encuentro copero ante el Xerez ha modificado sensiblemente los iniciales planes de trabajo rojillos. La expedición osasunista saldrá hacia tierras andaluzas hoy a las 15.00 y entrenará en Jerez sobre las 17.30. Asimismo, el jueves se entrenará en sesión vespertina, a las 17.00.