SEGUNDA B Derbi en Lasesarre
El Barakaldo hurga en la herida de un flojo Alavés
Los gualdinegros fueron superiores, especialmente en la primera parte, a un equipo babazorro que reaccionó demasiado tarde. El Glorioso sale de los puestos de play off tras la segunda derrota consecutiva.
BARAKALDO 2
DEPORTIVO ALAVÉS 0
GARA | BARAKALDO
El Barakaldo hurgó en la herida y dejó muy tocado a un flojo Alavés que pareció tocar fondo ayer en Lasesarre, no ya sólo por haber abandonado los puestos de descenso, sino por la pobre imagen ofrecida por el equipo en uno de esos partidos que sus aficionados tenían marcados por la rivalidad histórica.
Si los albiazules arrancaron la temporada con la clara vitola de favoritos, el equipo fabril les dio una cura de humildad en el derbi de ayer en Lasesarre, al llevarse el partido con todo merecimiento. El dominio de los de casa fue total, desde los primeros minutos ante un Alavés que no tuvo su día y no pudo ante el alto ritmo de juego e intensidad que impuso el cuadro vizcaino.
El Alavés, con el marcador en contra reaccionó algo en la segunda mitad, y tuvo un cuarto de hora bastante bueno. Pero se fue diluyendo en un choque en el que destacó el visitante Ruano, que intentó darle profundidad a su equipo, pero no fue secundado por el resto de sus compañeros, muy apagados y con poca mordiente.
La primera parte fue de claro dominio local. El Barakaldo salió en tromba y, antes del cuarto de hora, ya mandaba en el marcador. El gol llegó tras un mal despeje de Ruano que permitió a Urko Arroyo adelantar a los suyos.
Para deleite de sus aficionados, con el uno a cero, el Barakaldo siguió dominando con solvencia y llegó a acorrolar a un Alavés que no podía salir de su campo. Los vizcainos dispusieron de ocasiones suficientes para sentenciar el choque antes del descanso, pero la falta de acierto en los metros finales mantenía al Alavés vivo.
Reacción baldía
En la segunda parte el Alavés salió mucho mejor, tomando el mando de las operaciones un Ruano muy activo, que fue el mejor del partido. Suya fue una gran oportunidad que desbarató, muy bien, el meta local Etxebarrieta. Pereira dio entrada a Igor Martínez por el central Neru, que daba sensación de no estar al cien por cien, y el equipo ganó enteros.
Los gasteiztarras tuvieron buenas opciones de conseguir el empate, pero perdonaron y, como suele suceder en estos casos, terminaron pagándolo. Cuando mejor estaban los babazorros llegó el gol de cabeza de Pereda que dejó el choque sentenciado. en un nuevo saque de esquina, el jugador gualdinegro, remató de cabeza completamente libre de marca y cortó la reacción albiazul. El Alavés se fue apagando paulatinamente y el Barakaldo volvió a mandar en el partido como hizo en la primera mitad.