El paro sigue aumentando en Hego Euskal Herria y ya son 164.326 trabajadores las que se encuentran en situación de desempleo, frente a las 115.223 que se registraban en octubre del año pasado. Se trata de un aumento del 42,61%, que hace que 12 de cada cien trabajadores en activo se encuentra en paro.

El aumento respecto al mes de setiembre fue de 3.581 personas, un 2,23% más. Nafarroa el territorio que presentó un aumento más acelerado del desempleo, ya que fue del 3,71%, frente al 1,98% de Araba y Bizkaia y el 1,31% de Gipuzkoa. Incluso en valores absolutos, el territorio navarro fue donde más personas perdieron su empleo.

El aumento fue, sin embargo, menor que el registrado en octubre del año pasado, cuando la crisis empezaba a golpear al empleo de forma más acusada.

Por sectores, Servicios siguió siendo el que más aumentó el número de desempleados y supera ya los 100.000.

3,8 millones

En el Estado español, el desempleo sumó 98.906 nuevos parados. La cifra de incremento del paro de octubre -tercer mes consecutivo de subidas- fue prácticamente la mitad de la del mismo mes de 2008, lo que aprovechó el Gobierno español para augurar que «en pocos meses» las cifras de paro comenzarán a reducirse y que en la segunda mitad de 2010 se creará empleo neto.

No obstante, según los Servicios Públicos de Empleo del Ministerio de Trabajo, en un año el paro ha subido en 990.327 personas hasta los 3.808.353 desempleados. Además, el número de afiliados a la Seguridad Social se redujo en 26.149 personas en octubre, hasta los 17.908.945 trabajadores.

«Nula voluntad»

LAB opinó que «la destrucción de empleo sigue imparable mientras la banca y demás grandes empresas hacen gala de elevados beneficios», y añadió que «lo peor de todo es que ni las previsiones más optimistas vislumbran una mejora de la situación a medio plazo».

Criticó que las instituciones «se han limitado a inyectar dinero al sector privado y plantear medidas poco efectivas de cara a la galería, acompañadas, eso sí, de sus respectivas campañas propagandísticas».

Como ejemplo de «la nula voluntad» para abordar este problema con seriedad, mencionó los proyectos presupuestarios que están presentando en los gobiernos y diputaciones de Hego Euskal Herria, que «se niegan a mejorar la progresividad fiscal y liderar a través del sector público una economía más justa y equitativa que sea capaz de crear empleo digno».

A su juicio, prefieren «aplicar recetas caducas de la doctrina neoliberal, primando la eficiencia económica sobre el bienestar social», es decir, «la misma política que nos ha traído a la situación de destrucción de empleo» que sufre la clase trabajadora.

Por su parte, UGT siguió apostando por las medidas pactadas en el denominado «diálogo social» y echó en falta «una política industrial enfocada a la regeneración de la producción industrial y planes que incentiven el consumo», además del incremento de la protección social a las familias vascas que peor lo están pasando.

CCOO estimó que «no se espera una recuperación del empleo en el corto plazo, fruto de una falta de responsabilidad empresarial».

Ante este escenario, el sindicato defendió adoptar medidas que permitan reactivar la economía y advirtió, sobre todo, de la importancia de mantener las medidas de protección de las personas que han perdido su empleo y de las que han agotado sus prestaciones, mientras la recuperación del empleo no sea una realidad. Asimismo, apostó por abordar reformas para ampliar los sistemas de protección social.