La feria agrícola-ganadera más importante de la Cuadrilla de Mendialdea contó ayer con menos afluencia de la habitual debido a la incesante lluvia. No obstante, las personas que, siguiendo la tradición, se acercaron hasta Kanpezu para disfrutar de la mítica Feria de San Martín pudieron pasear, bajo el paraguas, por los puestos de venta de productos típicos de la zona. Alubia pinta alavesa, miel, queso, trufas, morcillas o pastas fueron algunos de los productos estrella. Los asistentes también dieron cuenta de una suculenta degustación popular organizada por Boilur, la Federación de Sociedades Gastronómicas de Araba. Además, se pudo comprobar en directo cómo trabajan las habilidosas manos de los artesanos en la muestra de oficios tradicionales.

Esta fiesta que surgió como un evento ganadero focalizado en la compra-venta de reses se perdió durante algunos años, hasta que volvió a retomarse en 1.990. La tradición manda que se celebre el domingo más cercano al 11 de noviembre.

A partir de las diez de la mañana, comerciantes, feriantes y visitantes se asomaban por las calles de Kanpezu. A consecuencia del mal tiempo, los feriantes confirmaban que «este año hay bastante menos gente, y eso se está notando en las ventas». En las calles también se podían ver puestos improvisados de venta de paraguas; sin embargo, estos tampoco se mostraban muy satisfechos con las ventas porque, atenta a las previsiones, «la gente ya trae su paraguas desde casa».

En contra de lo habitual, fueron pocos los animales que se dejaron ver. Tan sólo unas ocas y unos perros llenaron ese vacío. Los perros pastores realizaron una exhibición demostrando su capacidad para dirigir a las ocas con la misma habilidad que a las ovejas.

Jornada reivindicativa

Los ganaderos, respaldados por UAGA, habían decidido no acudir a la feria con la intención de mostrar su rechazo al plan de gestión del lobo que mantiene la Diputación de Araba, ya que consideran que es contrario a sus intereses.

Para las doce del mediodía había sido convocado otro acto de protesta. Esta vez, el objetivo de las decenas de personas que tomaron parte en la movilización era mostrar su oposición al anteproyecto de línea eléctrica de 400 kilovoltios entre Gasteiz y la localidad navarra de Muruarte propuesto por Red Eléctrica de España (Redesa).

Los opositores se reunieron detrás de una pancarta en la que se podía leer: «Patxi López, Miguel Sanz, Zapatero, Red Eléctrica Española respetad nuestros pueblos. Autopista elektrikorik ez».

Quienes se acercaron a Kanpezu pudieron informarse sobre el proyecto de alta tensión, que atravesaría zonas medioambientalmente muy sensibles de Nafarroa y Araba, mediante la exposición que la plataforma, los ayuntamientos afectados por la línea y la Cuadrilla de Mendialdea colocaron frente a la plaza Samuel Picaza.

Entre los paneles informativos destacaba uno que recogía las decenas de firmas de los cargos electos de los consistorios que resultarían perjudicados de llevarse a cabo este proyecto, que tiene previsto construir una red formada por una serie de torres -cimentadas por bloques de hormigón- de 46 ó 42 metros de altura, colocadas a una distancia media de 400 a 500 metros de distancia entre ellas.