El sindicato LAB emprenderá en los próximos días una dinámica bajo el lema «Langile hartu hitza, Euskal Herriak erabaki dezan», con el fin de incidir en el «nuevo debate político y social abierto en Euskal Herria» y que sirva para abrir otro ciclo político. Ainhoa Etxaide, secretaria general del sindicato, afirmó ayer en Donostia que «los trabajadores no podemos ser meros espectadores, no podemos ser sujetos pasivos». Por ello, instó a la clase trabajadora a impulsar que Euskal Herria dé pasos decisivos para conseguir el cambio político que necesita.

Tras señalar que en los últimos años se ha evidenciado la crisis política existente en Euskal Herria, afirmó que la necesidad de este cambio resulta obvia. Entrando en detalles, resaltó que PSOE, PP y UPN han renovado y reforzado sus pactos de Estado para cerrar el camino a cualquier posibilidad de cambio. Y con ello demuestran, a entender de LAB, que el cambio es una opción muy real.

Etxaide subrayó que estos partidos han dejado a un lado «las supuestas diferencias» que tienen entre ellos, para, entre todos, apropiarse de todo ámbito de poder y no dejar resquicio alguno a un cambio de escenario. No obstante, LAB entiende que con ello, lejos de solucionar el conflicto político, no hacen más que prolongarlo.

A su vez, y en relación a la gravedad de la actual coyuntura económica, señaló que el marco político vigente ha demostrado ser totalmente «inútil», toda vez que se constata que «carecemos de los recursos necesarios para satisfacer necesidades estructurales y afrontar los retos derivados de la crisis».

«El cambio es posible»

«Es obvio que en Euskal Herria necesitamos cambios», dijo Ainhoa Etxaide, «y pensamos que el cambio es posible, pero llevarlo a la práctica requiere esfuerzo y compromiso», matizó. Concretamente, consideró que la base y el objetivo del cambio político pasan por abrir un nuevo ciclo en Euskal Herria, «acordado entre los agentes vascos y legitimado por la ciudadanía vasca».

Para recorrer ese camino, la secretaria general de LAB resaltó que hay que alcanzar acuerdos políticos. En este sentido, apuntó que la gran manifestación del pasado 17 de octubre en Donostia -tras la detención de varios dirigentes de la izquierda abertzale- fue una denuncia directa a los ataques del Estado español, pero también constituyó una petición directa a los agentes políticos, sindicales y sociales para que ofrezcan respuestas y posicionamientos.

Porque «hay posibilidades», LAB trasladó tres llamamientos concretos a la clase trabajadora. Primero, animó a que participe en el proceso abierto, lo impulse y lo lleve a los centros de trabajo. «Tenemos que trasladar ahí la reivindicación que hacemos para abrir el nuevo ciclo político, así como el llamamiento para trabajar a su favor», señaló Etxaide.

Asimismo, «lejos de caer en la desesperanza», animó a continuar denunciando la estrategia del Estado español, y a conformar toda una «masa social a favor de los derechos democráticos». Y junto a todo ello, Ainhoa Etxaide hizo un llamamiento a toda la militancia de LAB para que continúe, «como hasta ahora», apoyando e impulsando el cambio político.