Un buen portero hasta 2013 o dinero para unas arcas muy necesitadas. Cualquiera de las dos consecuencias es positiva y así lo destacó ayer Jokin Aperribai, en referencia a la renovación de Claudio Bravo.

«Somos conscientes de que hay clubs que preguntan por Claudio y es posible que tengamos ofertas por él -reconoció el presidente donostiarra-, así que hemos buscado un doble objetivo: que sea jugador de la Real hasta 2013, pero también que si se da esa circunstancia de que pueda ir a otro club, la Real pueda sacar un rendimiento económico de ese traspaso». Una posibilidad que puede cobrar fuerza en verano, tras el Mundial. «Está haciendo una campaña magnífica, es el capitán de la selección chilena, mundialista... -recordó Aperribai-. No queríamos encontrarnos que seis meses después de ese Mundial pudiera fichar libremente por otro club».

El dirigente realista destacó que el club «ha negociado claramente» en estos términos y quiso agradecer que también Bravo y su representante se hayan mostrado igualmente abiertos en «todas las conversaciones que hemos mantenido».

Claridad, precisamente, es lo que se pide desde la Real a los jugadores que no han renovado aún. Con un nombre propio evidente en ese grupo; el de Asier Riesgo, que precisamente ayer se reunió con Aperribai, aunque el presidente no quiso desvelar detalles de la charla. Sí subrayó, sin embargo, que la exigencia del club en este tipo de circunstancias, pasa por la claridad. «Más que fechas límites, me gustaría tener voluntades claras. Me gustaría tener compromisos claros», insistió Aperribai, que no quiere «repetir experiencias pasadas».

De momento, ese compromiso ha sido claro, y positivo para la Real, en la mayoría de los casos. No en vano han sido 16 los jugadores que han renovado su contrato en los últimos meses, gracias a la «línea estratégica» marcada por el Consejo. «Era importante renovar a los jugadores que salieron de Zubieta -admitió-. Son patrimonio de nuestro club y esto significa dar el último empujón a estos futbolistas, que puedan revalorizarse y convertir así el gasto realizado en la cantera en una inversión a futuro».

Esa serie de renovaciones supone, además, la «consolidación» de la base de una Real de presente y futuro, según destacó Loren, que subrayó, en este sentido, la juventud de la plantilla realista.

Asamblea

Ayer se supo, por otra parte, que la Junta General de Accionistas de la Real se celebrará a finales del mes de enero, cuando, en principio, se habrá culminado ya el balance postconcursal.