Bizkaia Bilbao Basket
En el desierto un oasis te espera
Los de Vidorreta jugaron con un Alicante decepcionante. Damir Markota encontró la llave del buen resultado individual y colectivo.
BIZKAIA BILBAO BASKET 80
ALICANTE 58
Arnaitz GORRITI
Reza una canción que «hay mil millones de estrellas/ en esta noche que ahora negra ves/ en el desierto un oasis te espera/ aunque sólo arena veas». La travesía del desierto de los de Txus Vidorreta tuvo ayer un feliz encuentro con un oasis lleno de agua y víveres para el camino, y mantas y un refugio para pernoctar. Sin hacer un baloncesto All Star, los bilbainos cortaron su racha de derrotas en liga y, de paso, se dieron un relajante baño de autoconfianza para lo mucho que resta de campaña.
El arranque resultó frío, quizás por el horario, hasta que Markota empezó a atinar. El dálmata enseñó a sus compañeros el camino a seguir anotando 12 puntos en diez minutos y, a partir de ahí, con un 24-12 al final del primer asalto, la victoria estuvo en el zurrón local. De hecho, el cuadro levantino decepcionó, donde los chispazos de Austin o Avdalovic resultaron muy intermitentes. Mumbrú y Banic se encargaron de abortar cualquier amago de reacción. Seibutis y Javi Rodríguez también exhibieron un buen nivel.
Aplausos a Moiso
La tarde-noche del Bizkaia Arena fue redonda, de reconciliación entre los hombres de negro y su afición. Tampoco hacía falta demasiado, pero el ejemplo más palmario fue el de Moiso.
El pívot galo jamás dominó bajo el aro, pero sí puso actitud, de tal forma que la afición local se lo premió con aplausos, y hasta estalló en el par de alley oops que culminó con Salgado. Varias acciones de Conley también merecieron la ovación. Contra el Gran Canaria, allá en «La Roca», será otra cosa.
No fue un buen partido, ni de lejos, fuese por el horario o por ser un encuentro de mitad de semana. Entre la mediocridad Bilbao Basket exhibió un mayor «fondo de armario», lo que le valió para ganar sin pasar apuros.
Sin ruido y con visible alivio, Txus Vidorreta alabó el buen trabajo defensivo como clave a la hora de romper la mala racha de resultados.
«Sobre todo al principio, el balón quemaba en las manos, pero hemos podido abrir brecha a partir de una buena actividad en defensa. Debemos seguir trabajando en ataque pero a partir del buen trabajo en defensa. Confiar en ese trabajo, quita mucha ansiedad», declaró.
Cuestionado acerca de Jerome Moiso, el de Indautxu se mostró «satisfecho» por la labor del pívot, especialmente en defensa, pero también quiso meter en el saco de los halagos a gente como Guardia, del que destacó su «intensidad defensiva» o Damir Markota, del que dijo que, a pesar de «amagar en inicio con un partido con mala mentalidad, nos ha ayudado a abrir las primeras diferencias».
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