Dilucidada la eliminatoria en el choque de ida, en el que se impuso por 28-43, el San Antonio buscará gustarse y dar espectáculo a su parroquia en el segundo partido que le medirá con el Kras Volendam a partir de las 16.15 en el Pabellón Universitario de Nafarroa y con la presencia de las cámaras de ETB.

Ese es el único aliciente que le queda al cuadro navarro para saltar a la pista en lo que apunta a un entrenamiento con mayor ritmo y en el que, dado el horario -aspecto por el que se quejó Chechu Villaldea- y el que sea televisado, a buen seguro restará presencia de aficionados en las gradas.

Dado el devenir de la eliminatoria, en esta ocasión las bajas antonianas tienen menor trascendencia, pero también las hay. Así, ni Belaustegi ni Santi Urdiales, ambos lesionados, serán de la partida, lo mismo que Nikcevic, que sufrió un fuerte golpe en la rodilla frente al Arrate y que, como medida de precaución, guardará descanso.

No todos se lo podrán tomar con la misma relajación. La cita será una magnífica oportunidad para los más jóvenes, quienes querrán agradar al técnico asturiano. Es el caso de Crowley, Gedeón o Eloy, que ya brillaron a gran altura en Holanda, y que trarán de mantener el mismo nivel ante un rival prácticamente amateur.

«Todos ellos están trabajando muy bien y por eso deben disponer de oportunidades», ratificó Villaldea, quien no quiere ni un ápice de relajación en su escuadra. «Independientemente de los quince goles de diferencia, nuestro objetivo es hacer un partido serio y refrendar la confianza que no está dando el buen juego y las victorias de las últimas jornadas», especificó.

El Kras Volendam estrena míster esta campaña y ha bajado notablemente su rendimiento con respecto a la pasada temporada, ya que ha perdido a tres de sus mejores hombres. Pese a todo, Villaldea los analizó como un equipo «muy rápido en ataque, donde hacen las cosas bastante bien, mientras que en el apartado defensivo son bastante más flojos».