El objetivo es dejar a ocho puntos a un rival directo ahora mismo
MURCIA-R. UNIÓN
GARA |
Desde que ganara 0-2 en Girona, el Real Unión no sabe lo que es conseguir un triple lejos del Stadium Gal. Y ello se nota en la clasificación, donde no basta con mantener una cierta línea de regularidad casera, sino que se hace necesario conseguir más puntos a domicilio.
Y en ciertas ocasiones como es el caso, el objetivo es doble, dado que el Murcia -no levanta cabeza desde que bajara de Primera- es ahora mismo un rival directo en la lucha por la permanencia. Un triunfo en la Nueva Condomina no sólo permitiría dar un salto en la tabla, sino que dejaría a los pimentoneros a la considerable distancia de ocho puntos.
Por si esto fuera poco, los irundarras están empatados con el Celta, éste en zona de descenso, por lo que un nuevo tropiezo pondría las cosas muy complicadas para los de Iñaki Alonso.
En todo caso, para obtener un resultado positivo, los unionistas deberán jugar con mayor intensidad y agresividad que en Cádiz y Elche, donde se dejaron remontar después de ponerse por delante en el marcador.
Alonso no podrá repetir el once que empató contra el Las Palmas, ya que Aitor Sanz, Markel Robles y Juan Domínguez se han quedado en Irun por problemas físicos. Les sustituirán casi con seguridad Ángel Montoro, Asier Salcedo y Félix Quero.