Juanjo BASTERRA

En la sesión inaugural de la vigésimocuarta Conferencia Europea de Otoño sobre el Gas (EAGC) la estrella del debate se situó en la garantía y seguridad del suministro en la Unión Europea, después de los problemas que ocurrieron con el bloqueo ruso a través de Ucrania.

La crisis económica ha recortado las expectativas. El futuro para la industria del gas no se ve tan prometedor como hace unos años, como reconoció James Ball, presidente de esta conferencia. En el encuentro inaugural saltó la noticia cuando el vicepresidente de Comercio y Logística de Iberdrola, Julio Castro, reclamó que se dé marcha atrás a la decisión de no poner en funcionamiento el gaseoducto de de doble dirección que pasa por Irun, como comunicó la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a finales de octubre, porque no se cumplieron las expectativas de inversión y transporte. De esta manera, sólo se mantendría una de las dos interconexiones de gas que pasan por Euskal Herria: la de Larraine por Nafarroa. También está avanzada la conexión con Catalunya por el sureste francés.

El representante de Iberdrola explicó que Irun no ha reunido todas «las reglas de colocación de la capacidad del uso del tubo, por un 0,4%. Se trata de contratar transporte a largo plazo, por más de diez años, por un montón de empresas». Castro aseguró que los propietarios de los tubos del lado del Estado español -Gas Euskadi y Naturgas- «hace años han hecho los deberes, pero en el lado francés no se ha cumplido por un 0,4% de inversión», con lo cual la autopista del gas por Irun ha sido desterrada, se queda en una conexión simple de ida, pero no de vuelta, que es lo que garantiza el suministro energético. Castro, sin embargo, asegura «que hemos fallado por una miseria» y, por lo tanto, pide que intervengan «las autoridades políticas, no las empresariales que ya nos hemos confesado, para resolver el entuerto y no den por cerrado el proceso». Para él, la solución pasa por que ese porcentaje «tan bajo de recursos económicos que faltan, lleguen de los fondos que la UE cede a favor de este tipo de proyectos, para que sean rentables».

Presión francesa

A juicio de Iberdrola, la polémica surje porque los franceses sostienen que la autopista del gas por Larraine es suficiente. Así, reconoce que por Nafarroa se invertirá en una autopista que podrá transportar en la doble dirección 5 bcm (miles de millones de metros cúbicos de gas) e Irun no podrá llevar adelante los 2 bcm previstos en el corredor Euskadour. Castro reconoció, de forma directa, que «si no hacemos la autopista no podemos ir a ninguna parte». El consejero delegado de EDP y directivo de Naturgas Energía, Joao Manso Neto, señaló, en el descanso de la sesión, que «espera que la decisión adoptada sea reversible». La realidad es que en la península Ibérica, es decir, el Estado español y Portugal, se consumen 34 bcm, pero para el próximo año se espera la puesta en marcha del gaseoducto con Argelia, el Medgaz, que aportará otros 7 bcm. Por eso, tanto los representantes de Iberdrola y Naturgas Energía como los de la italiana Eni entienden que «cuantos más puntos de conexión existan, más garantías de suministro habrá para la UE».

En la primera jornada quedó establecido que «la península ibérica es una isla en materia energética» y que «no existe una unidad en el mercado gasista en la Unión Europea», porque no existen interconexiones adecuadas entre el Estado español y el Estado francés y la conexión con Rusia no es garantía, como dijo el portugués de EDP.

El consejero de Industria del Gobierno de Lakua, Bernabé Unda, señaló que el tercer tanque de Bahía Bizkaia Gas de ciclo combinado estará operativo en 2013 y dijo que para 2015 el almacenamiento subterráneo de la plataforma Gaviota duplicará su capacidad.