Una alta participación es el gran reto para quienes hoy organizan y apoyan la celebración de las consultas independentistas en los Països Catalans, a las que están convocadas 700.000 catalanes. Muchos ojos están puestos en los 166 municipios que hoy celebran la consulta. Obviamente los de quienes las organizan, pero también del centenar de poblaciones que ya han anunciado que en febrero o abril emularán la experiencia. Y más allá del Principat, en las islas Balears, como mínimo los ojos de 103 alcaldes y concejales que ayer constituyeron la plataforma por el derecho a decidir Avançam van a estar atentos a los resultados.

Con un interés muy distinto, también en Madrid van a seguir la votación. A diferencia de lo que sucedió con la de Arenys de Munt en septiembre, esta vez el Estado español ha preferido no oponerse frontalmente a las consultas pues considera que su rechazo podría provocar una mayor participación.

También en otras naciones se ha levantado el interés por lo que hoy sucederá en 166 poblaciones catalanas. Más de treinta observadores de diversos puntos geográficos seguirán de cerca el desarrollo de las consultas.

Entre ellos hay representantes de Udalbiltza, nueve alcaldes de la izquierda abertzale y cargos electos de distintas naciones sin Estado. Pero más allá de despertar el interés de otros movimientos a favor del derecho a decidir, muchos medios de comunicación europeos se han acreditado para cubrir la jornada electoral.

Las papeletas tienen una pregunta compartida por la mayoría de municipios: «¿Está usted de acuerdo con que la Nación Catalana se convierta en un Estado de derecho, democrático y social, integrado en la UE?».

La izquierda independentista catalana no está satisfecha con el texto, y en algunos municipios ha logrado cambiar el término de «Nación Catalana» por el de «Països Catalans» y también eliminar la referencia a la Unión Europea.

Pero en las poblaciones donde no ha conseguido cambiar la formulación, igualmente las distintas organizaciones que componen este movimiento se han implicado a fondo con unas consultas que para muchos catalanes son un paso que les acerca más a la independencia.

Los habitantes de Sant Jaume de Frontayà ya ejercieron ayer con éxito su derecho al voto.