Habrá que esperar en torno a dos meses más para poder ver, por fin, al nuevo Baskonia al completo, ya que ante la persistencia de las molestias en el tobillo de Brad Oleson, los regidores del Baskonia han decidido recurrir al prestigioso Dr. Van Dyck -que recientemente ha tratado a Cristiano Ronaldo-, que parece haber dado con los motivos de estas dolencias, y el de Alaska deberá volver a pasar por el quirófano.

El jugador ha sido diagnosticado de un pequeño arrancamiento óseo en la zona posterior-inferior del astrágalo que le impide rendir al 100% en su actividad deportiva y se ha decidido someterle a una artroscopia para extirpar los pequeños fragmentos óseos. Dicha cirugía será llevada a cabo en Rotterdam por el Dr. Van Dyck con la colaboración del Dr. Mikel Sánchez, este viernes. El tiempo de recuperación es incierto pero se espera que no sobrepase los dos meses.

El tobillo está siendo la cruz de Oleson, que desde el pasado mes de mayo arrastra molestias que no termina de superar por un esguince mal curado y que se produjo en las últimas jornadas de la fase regular cuando aún militaba en el Fuenlabrada.

También se retrasa el debut oficial de Walter Herrmann, del que Dusko Ivanovic dijo ayer que será muy complicado que pueda jugar hoy a pesar de que el propio jugador se había puesto el partido ante el Olimpija como plazo. Los contratiempos en varios jugadores han hecho apostar por la prudencia a los médicos y no se quiere arriesgar lo más mínimo. El que tiene bastantes más posibilidades de reaparecer hoy mismo es el base Marcelinho Huertas, cuyo último partido lo jugó precisamente en el Tívoli Arena.

Certificar el pase

Los aspectos médicos dejan un poco de lado el partido que debe disputar hoy el Baskonia ante el Union Olimpija, en el que los de Ivanovic deben dejar sentenciado su pase al Top-16. Además, el enfrentamiento directo entre el CSKA y el Maccabi en Moscú también puede ayudar en pos del primer puesto.