Confiados en que atacar a la izquierda abertzale y a los presos (un sector especialmente indefenso en este terreno) nunca conlleva repercusiones legales, por vender y enredar algunos medios y algunos periodistas están dispuestos a hacer de todo, incluso el ridículo.

«Deia» y otros periódicos del Grupo Noticias publicaron el 8 de noviembre con grandes titulares que «Otegi y Díez intentan poner a ETA en un brete al rechazar la violencia» y añadían que eso ocurriría en «una carta basada en los `principios Mitchell' del proceso irlandés» que «hace pública hoy GARA». Luego, la carta de los encarcelados que publicó ese día GARA no era la que anunciaban «Deia» y el Grupo Noticias pero nadie rectificó.

«El País» abría el suplemento «Domingo» de esta semana con una foto a toda página de Arnaldo Otegi y el titular «Busca amigos. El conglomerado ETA-Batasuna ofrece treguas a organizaciones democráticas a cambio de que se incorporen a su `frente independentista'». Entre las «pruebas» que sustentan la noticia, señala que «el 24 de abril pasado» un militante de Batasuna «telefoneó a Arnaldo Otegui, encarcelado en la prisión de Martutene, y le transmitió el siguiente mensaje: `Me ha dicho Txiki (apodo con el que se conoce a Adolfo Muñoz, secretario general de ELA) que eres un fenómeno, que haces el bacalao al pilpil de cojones, que cocinas muy bien, que eres muy bueno y que no podemos perderte como cocinero'». Añadía «El País» que la Policía interpretó que «el secretario general de ELA atribuía a Otegi el `mérito' de conseguir una tregua que fue del 7 de mayo al 7 de junio». (¿?)

Sus íntimos sabrán si Otegi es buen cocinero o no, pero lo que cualquier periodista debiera saber antes de escribir es que el 24 de abril no estaba en Martutene.