En un acto público realizado en la provincia de Abyan, en el sur de Yemen, militantes de Al Qaeda afirmaron que su enemigo es el Ejército estadounidense, no el yemení. «Los soldados deberían saber que no hay problemas entre ustedes y nosotros. El problema es con Estados Unidos y sus lacayos», remarcó un hombre a cara descubierta que dijo hablar en nombre de Al Qaeda.

El canal de televisión Al Jazeera mostró imágenes de un militante de Al Qaeda, acompañado de un grupo de hombres armados, mientras hablaba a una multitud. Seguidores del Movimiento del Sur, que reclama la independencia de esa zona y acusa al Gobierno yemení de marginarlo, participaron en este inusual mitin.

El lugar donde se realizó el mitin fue bombardeado la pasada semana. El Gobierno alegó que el objetivo del ataque era un supuesto campo de entrenamiento de Al Qaeda. En contra de esta versión, el activista local Abbas al-Assal denunció que murieron 64 personas, entre ellas 23 niños y 17 mujeres.

El sábado, el diario «The New York Times» informó de que EEUU proveyó de equipos militares e información de inteligencia a las fuerzas yemeníes para efectuar el bombardeo y las posteriores redadas en Ayban y Arhab.

Por otra parte, milicianos chiíes del norte del país, contra quienes el Gobierno ha lanzado una vasta operación, denunciaron que 54 personas perdieron la vida en un bombardeo de la aviación saudí en la provincia de Saada. «Estas brutales masacres se producen con el beneplácito del Gobierno yemení, que permite una agresión extranjera contra civiles inocentes sin ninguna justificación», resaltó el líder hutí Abdel Malek al Huti.

Desde que el conflicto se agudizó en agosto pasado, se han dado varias incursiones de milicianos hutíes y de los ejércitos de Yemen y Arabia Saudí a ambos lados de la frontera, zona montañosa de difícil acceso donde la divisió territorial no está del todo definida. Cientos de personas han muerto y decenas de miles se han visto obligadas a abandonar sus casas.