El Ibex se quedó a puertas de los 11.900 puntos en una sesión con datos para todos los gustos. En EEUU decepcionó la estimación definitiva del PIB para el tercer trimestre. Del 2,8% anunciado en la segunda lectura se ha pasado al 2,2%. Esta referencia, evidentemente negativa por lo abultado del recorte, tuvo enfrente al importante aumento en la venta de viviendas de segunda mano durante el mes de noviembre. En la parte negativa de la balanza también se encontraron el descenso en el índice GFK alemán de confianza empresarial y la caída en la actividad manufacturera del área de Richmond. En el ámbito financiero se sintió la rebaja de calificación crediticia para Grecia por parte de Moodyís hasta el nivel de A2, con lo que se cierra el círculo de penalización a su deuda abierto antes por Standard and Poorís y Fitch. Con todo, los inversores quisieron ver la botella medio llena y propinaron un nuevo empujón a los índices. En el caso del Ibex le llevó hasta los 11.890,80 puntos, tras sumar un 0,51%. Francfort (+0,26%), Londres (+0,65%) y París (+0,68%) registraron avances parecidos. En el Ibex, los pesos pesados dieron otro paso adelante, aunque tuvieron que conformarse con subidas inferiores al 1%. Los dos mejores fueron BBVA e Iberdrola, que se apuntaron poco más del 0,80%. En lo más alto del ránking, Técnicas Reunidas (+3,87%) y Grifols (+3,46%). Entre los perdedores, destacó Iberia (-2,04%). En el CAC 40, que logró ayer un nuevo máximo anual de cierre con 3.898,38 puntos, despuntaron ST Microelectronics (+2,96%) y Renault (+2,28%). Las acciones de Unibail (-1,70%) fueron las más castigadas.