Musavi dice estar dispuesto a morir pero advierte de que eso no frenará la crisis iraní
El líder opositor iraní Mir Husein Musavi afirmó estar dispuesto a morir en su lucha contra la reelección de Mahmud Ahmadineyad, pero advirtió de que su muerte no frenará la crisis que vive el país.
GARA
El principal líder de la oposición iraní, Mir Husein Musavi, aseguró ayer que está dispuesto a morir como un «mártir» en la lucha que mantiene tras la reelección del presidente, Mahmud Ahmadineyad, y su derrota electoral del 12 de junio, y pidió al Gobierno que ponga fin a la represión para que cese la crisis en la que se encuentra sumida la República Islámica.
«No rechazo la idea de convertirme en un mártir como los que hicieron ese sacrificio después de las elecciones para obtener la satisfacción de sus exigencias nacionales y religiosas», afirmó el ex primer ministro en un comunicado difundido en la página web kaleme.org, el primero tras las violentas manifestaciones del pasado 27 de diciembre.
«Mi sangre no es más roja que la de ellos», agregó Musavi, cuyo sobrino figura entre las ocho personas muertas en las protestas antigubernamentales realizadas durante la jornada de duelo chií de la Ashura. Esos enfrentamientos dejaron cientos de heridos y de detenidos, según el balance de las autoridades.
Esa movilización de la oposición fue la más masiva y la más sangrienta desde las grandes manifestaciones que tuvieron lugar tras la reeleción de Ahmadineyad, que dejaron entre 36 y 72 muertos, según las fuentes.
«Yo digo claramente y de forma explícita que las órdenes de ejecutar, matar o encarcelar a (otro líder opositor, Mehdi) Karubi, a Musavi o a la gente como nosotros, no resolverá la situación... No tengo miedo a morir en favor de las demandas del pueblo», indicó, según la nota.
El martes, un influyente dignatario religioso, el ayatolá Abbas Vaez Tabasi, sostuvo que los líderes opositores son «enemigos de Dios» que merecen la muerte.
Fin de la represión
Mir Husein Musavi hizo un llamamiento a Ahmadineyad a poner fin a la represión para sacar a Irán de la «grave crisis» que atraviesa.
El Gobierno «debe asumir su responsabilidad por los problemas que ha creado en el país, (...) liberar a los presos políticos y reconocer el derecho del pueblo a reunirse», agregó Musavi, que rechazó las acusaciones de las autoridades de que los opositores actúan en connivencia con Occidente y de que la impugnación del resultado de las elecciones presidenciales se hubiera transformado en una campaña para derrocar al régimen islámico.
Musavi precisó ayer que «Irán está sumida en una seria crisis» desde las elecciones presidenciales de junio y que «las duras demandas crearán un alzamiento interno», antes de demandar un cambio en la ley electoral.
Musavi pidió al Gobierno que asuma su responsabilidad por la crisis creada y reclamó la liberación de los presos políticos, el reconocimiento del derecho de reunión y un cambio en la ley electoral.