Militares israelíes no viajan a Gran Bretaña para evitar ser detenidos
Tal y como sucedió recientemente con la ex ministra de Exteriores Tzipi Livni, varios militares israelíes de alta graduación suspendieron un viaje a Gran Bretaña ante el temor de ser detenidos por las denuncias de crímenes de guerra cometidos en Gaza.GARA |
Israel ha retrasado la visita a Gran Bretaña de una delegación de militares de alto rango ante el temor de que sean perseguidos por la Justicia por crímenes de guerra, indicó ayer el viceministro de Exteriores, Danny Ayalon.
«Estos militares fueron invitados por Gran Bretaña, pero se quedarán en Israel mientras no estemos seguros al cien por cien de que no serán perseguidos por la Justicia de ese país», declaró Ayalon a la radio pública israelí.
Ayalon indicó durante la entrevista que mantuvo ayer con Patricia Janet Scotland of Ashtal, la fiscal general británica que se encuentra realizando una visita privada en Israel, le expuso la necesidad de una reforma del principio de competencia universal previsto por la legislación británica.
Este principio permite que cualquier juez ordene la detención de una personalidad extranjera que visite Gran Bretaña si existe una denuncia y considera que ha podido participar en crímenes de guerra o crímenes contra la Humanidad.
Los militares y cargos políticos israelíes que dirigieron la matanza de Gaza del pasado invierno podrían verse afectados por esta medida, que ya se aplicó al dictador chileno Augusto Pinochet.
«Esta legislación permite cualquier desviación. Inicialmente tenía como objetivo a los criminales nazis, pero las organizaciones terroristas como Hamas se sirven de ella actualmente para tomar como rehenes a las democracias», añadió Ayalon.
«Hay que acabar con este absurdo, que perjudica notablemente las excelentes relaciones bilaterales israelo-británicas», insistió.
El mes pasado, un tribunal londinense emitió y posteriormente retiró una orden de detención contra Tzipi Livni, líder del partido opositor Kadima, por su papel de ministra de Exteriores del Gobierno israelí que llevó a cabo la matanza de Gaza del invierno pasado.
Comprensión de Londres
Scotland of Ashtal reconoció que las órdenes de detención emitidas por los jueces británicos contra militares y cargos políticos israelíes «podrían causar cierta tensión en las relaciones de ambos países».
La fiscal general británica se declaró «consciente de la urgencia de encontrar una solución al problema», según declaraciones recogidas por el diario «Yediot Aharanoth»
Después de que Livni se viera obligada a suspender su viaje a Inglaterra ante el temor de ser detenida, tanto el primer ministro británico, Gordon Brown, como el ministro de Exteriores, David Miliband, prometieron al Estado sionista que no volvería a repetirse un caso similar.
Sin embargo, fuentes israelíes denuncian que Gran Bretaña no ha hecho nada para cambiar la legislación y destacan que la prueba de ello es la suspensión del viaje de los militares.
El Ayuntamiento de Jerusalén ha aprobado la construcción de cuatro edificios de viviendas reservadas a judíos en el Monte de los Olivos, en la parte oriental de la ciudad, según anunció ayer su portavoz, Steven Miller.
«Estos edificios comprenderán 24 viviendas. No es algo nuevo», añadió Miller sobre este proyecto diseñado por el empresario estadounidense Irving Moskowitz, uno de los principales impulsores de la judeización de Jerusalén.
«Este proyecto de construcción es un desafío a la comunidad internacional y a los esfuerzos árabes e internacionales que tienen como objetivo salvar el proceso de paz», reaccionó Nabil Abu Rudeina, portavoz del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas.
«Condenamos lo más vivamente posible esta decisión. El gabinete de Netanyahu secuestra las negociaciones de paz, ya que modifica totalmente la realidad sobre el terreno, prosiguiendo las actividades de colonización», afirmó Saeb Erekat, principal negociador palestino, desde Doha.
Israel ha hecho caso omiso a las demandas de EEUU y otros agentes a que detenga la colonización. GARA
Los cristianos palestinos boicotearán hoy en Belén las celebraciones de la víspera de la Navidad greco-ortodoxa ante la decisión del Patriarcado de vender y arrendar tierras cisjordanas a israelíes.