El nuevo presidente croata, el socialdemócrata Ivo Josipovic, se enfrenta a «la misión histórica» de culminar el ingreso de su país en la UE y de eliminar la corrupción que asola la Administración de esta república independiente desde 1991, según destacan los analistas tras la confirmación de su victoria (60,29% de los votos) en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas el domingo.

«La misión histórica de Josipovic está clara: conducir a Croacia a la UE», destaca el analista político Branko Mijic.«Un país que nació durante una guerra finalmente se transformará en un país de la paz, un país civilizado en el seno de Europa», añadió .

Para Radovan Vukadinovic, profesor de relaciones internacionales en la Universidad de Zagreb, «la elección de Josipovic es sin duda un paso importante para el reforzamiento de las relaciones entre Zagreb y Bruselas».

«Josipovic también va a intentar transformar a Croacia en un ejemplo a seguir para los países de la región que aspirar a integrarse en la UE», destacó Vukadinovic.

El analista Davor Butkovic destacó que con la elección de Josipovic, un experto en Derecho que no participó en política en la década de 1990, marcada por la independencia y un proceso de privatización caracterizado por la corrupción, muestra que los croatas han optado por «un nuevo tipo de político».