Derrota en Manresa
Para cuando despertó, el Manresa ya no estaba allí
Los hombres de Pablo Laso estrenaron la segunda vuelta con derrota debido a un pésimo arranque. Sólo Andy Panko, Detrick y Miralles llegaron a un 10 de valoración, lo que habla del escaso nivel del encuentro.
MANRESA 69
LAGUN ARO GBC 57
Arnaitz GORRITI
Reza el microrrelato de Augusto Monterroso que, «cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí». Por contra, para cuando Lagun Aro GBC despertó, el Manresa ya no estaba porque se había escapado.
El resto del partido fue un remar contra corriente de los hombres de Laso, más por convicción que por calidad, y es que el duelo de ayer no pasará precisamente a la historia. Sólo Panko, Detrick y Miralles llegaron a valorar 10 o más -38 entre los tres- para un total de 53. Los donostiarras se arrimaron hasta ponerse a dos puntos gracias al trabajo de los períodos intermedios, pero un último parcial de 27-19 para los de Ponsarnau decantó el choque para los locales.
El arranque de los del Bagés fue tremendo. Brian Cusworth se hizo dueño de la zona y San Miguel realizaba una dirección sobria y eficaz. Por contra, Lagun Aro se veía perdido en ataque y sin el rebote. Después del 24-13 del primer cuarto, dos triples y una contra de Grimau dejaban el marcador en 32-15.
No obstante, la defensa donostiarra subió líneas y Miralles y Panko se ofrecieron para remontar punto a punto. La pájara manresana también ayudó, pero el 33-26 del descanso dejaba un halo para la esperanza.
De la esperanza a los triples
El halo de esperanza no fue sino un tercer cuarto infame, que vio jugadas como un pase de Panko al árbitro o un triple convertido por Uriz a tablero. El cuadro manresano tampoco afinó y, de hecho, al último cuarto se entraba con opciones, con 42-38.
Pero el último cuarto fue otra cosa. Manresa rompió el partido con cinco triples -dos Montañez, Lewis y dos Grimau- y aunque Ignerski y Miralles trataron de reenganchar a su equipo en el partido, ya resultó demasiado tarde.
«Contento» con el trabajo defensivo aunque decepcionado por la derrota, Pablo Laso estimaba que las claves de la derrota fueron «no ponernos por delante en nuestro mejor momento de juego en el tercer cuarto y los triples que nos han metido» en el último período. «En los partidos que nos restan a partir de ahora, deberemos trabajar para recuperar nuestro nivel», añadió el gasteiztarra.
A pesar de reconocer que el partido «no fue muy atractivo para el espectador, pero sí muy trabajado por parte de los dos equipos. También en la primera vuelta empezamos con derrota ante Manresa, pero el equipo fue capaz de tirar hacia arriba. Así pues, nos queda seguir trabajando», acabó.A. G.