El futuro de la coalición
Aralar decide seguir como Nafarroa Bai, «aunque no estemos todos»
El debate en NaBai se agudiza tras trascender que Aralar registró esta marca en paralelo a la inscripción hecha por la coalición. Txentxo Jiménez no lo niega. Ayer dijo además que «NaBai puede seguir, aunque no estemos todos».
Ramón SOLA | IRUÑEA
Los socios en Nafarroa Bai se han enfrascado en la enésima polémica, pero esta vez tanto el elemento de fricción como el momento en que se produce hacen vaticinar que puede resultar decisiva. El motivo de la polémica es especialmente delicado: Aralar confirma que en 2004 registró la marca Nafarroa Bai, aunque le resta importancia y ve intenciones aviesas en la filtración del tema. Y el momento también es clave, ya que Aralar reitera un ultimátum que tiene el 15 de marzo como fecha límite. Afirma que para entonces debe haber un compromiso para cohesionar la coalición, tanto a nivel político como organizativo. En caso contrario, su coordinador en Nafarroa, Txentxo Jiménez, anticipó ayer que «Nafa- rroa Bai puede seguir, aunque no estemos todos».
Esta declaración alimenta la sospecha de algunos miembros de la coalición de que Aralar prefiere seguir en solitario o con algún otro socio, pero siempre bajo el paraguas de la sigla de Nafarroa Bai, en caso de que se abran paso otro tipo de alian- zas independentistas que incluyan a la izquierda abertzale. Jiménez matiza que «el plan A y el plan B de Aralar son Nafarroa Bai», pero reitera en paralelo que «si hay una imposibilidad absoluta, habrá que avanzar aunque sólo sea con quienes sí quieren seguir con NaBai».
El resto de socios (EA, PNV y Batzarre) siempre ha recalcado su apuesta por la coalición, pero la situación se ha complicado en las últimas semanas, más aún después de que Aralar situara a NaBai como «incompatible» con otras alianzas como la que exploran la izquierda abertzale y EA, aún de modo incipiente.
Txentxo Jiménez incide en que tienen prisa por clarificar la situación. Subrayó que mantienen la fecha tope del 15 de marzo -puesta por Aralar-, con el objetivo de tener margen temporal suficiente para preparar las elecciones que se celebrarán en Nafarroa unos catorce meses más tarde. De hecho, con el fin de acelerar ese proceso, Aralar presentó ayer un nuevo documento de «bases políticas para NaBai para 2011-2015».
«Un golpe bajo»
En este complejo escenario se ha dado a conocer que Aralar registró por su cuenta la marca Nafarroa Bai para varios usos. Ocurrió en marzo de 2004, aunque la cuestión no había trascendido hasta ahora. Y esto sirvió a Jiménez y Aritz Romeo para afirmar ayer que la filtración ha sido intencionada y que tenía como objetivo erosionar la coalición.
Jiménez considera incluso que se ha tratado de una maniobra cocinada artificialmente: «Quien promovió que en la sesión de la Permanente de Nafarroa Bai del jueves pasado se debatiese la situación jurídica de NaBai tenía como intención directa preparar la filtración». Anteayer, ``Diario de Navarra'' daba cuenta de esta polémica y aseguraba que los otros tres socios habían reprochado su actuación al respecto al partido que dirige Patxi Zabaleta.
Txentxo Jiménez asegura que las cosas no fueron así, sino que varias de las intervenciones producidas en esa Permanente consideraron que se trataba de una polémica artificial. En cualquier caso, el coordinador de Aralar asegura que se ha tratado de «un golpe bajo» que achaca exclusivamente a un socio, pero sin identificarlo ni dar pistas claras. Dijo que el objetivo es que Nafarroa Bai aparezca siempre con connotaciones negativas, que el debate sobre la cohesión quede empantanado, e incluso allanar el camino a una eventual ruptura de la coalición.
Preguntado por si esto cambiará su relación con el partido al que se atribuye la filtración, Txentxo Jiménez sonrió y dijo: «Si te dan un susto en una esquina, lo lógico es que vayas por la otra acera».
Acatamiento de la ilegalización
En cuanto al documento presentado para NaBai, Aralar asegura que se trata de un planteamiento de mínimos «en el que todos podamos estar cómodos» y que busca salir del atolladero actual. «En estos meses no ha habido avances sustanciales», admitieron Jiménez y Romeo.
Sobre la relación con la izquierda abertzale, uno los temas claves de este debate interno, Aralar plantea que Nafarroa Bai rechace la Ley de Partidos y reconozca los derechos de los ediles ilegalizados, pero propone al mismo tiempo que «los requerimientos judiciales que, derivados de las ilegalizaciones, reciban para su ejecución alcaldes de NaBai, serán acatados por imperativo legal».
Aralar admite que registró la marca Nafarroa Bai para algunos usos en 2004, en paralelo a los registros que hizo la propia coalición. Sin embargo, niega que haya alguna intencionalidad oculta en esa acción. Jiménez dice que ocurrió simplemente porque Aralar fue «el partido que primero hizo una apuesta por Nafarroa Bai» y el que más se implicó en esas tareas. Y subraya, sobre todo, que la situación era conocida por el resto de socios y que no había generado polémica hasta ahora.
El asunto saltó a la palestra anteayer. Ese día Aralar optó por no entrar en detalles. Ayer sí lo confirmó, pero en un primer momento Jiménez le restó importancia y situó ese registro en la misma cadena que el realizado por la coalición como tal. Ante las insistentes preguntas del diario que publicó el caso, el coordinador de Nafarroa pasó luego a afirmar que en realidad esa acción de Aralar ha sido «la que ha dado estabilidad a la coalición», toda vez que el resto de registros caducaban después de los procesos electorales mientras que éste tan polémico tiene diez años de vigencia.
Aralar añade en su defensa que se trató de una acción puntual. Jiménez garantizó que luego no ha habido más «movimientos de este tipo». Y enfatizó que no se repetirá porque «no haremos nada que ponga en riesgo que NaBai siga funcionando». R.S.
El debate abierto sobre posibles realineamientos en el campo abertzale llega también al PNV. Su presidente en Bizkaia, Andoni Ortuzar, descalificó ayer la posición adoptada por EA, pero se mostró seguro también de que en un futuro las cosas pueden cambiar mucho, de modo que no descartó que el partido jelkide pueda colaborar «con fuerzas abertzales para sacar adelante este país y para ir construyendo la nación vasca».
«En el camino nos encontraremos, ahí van a tener al PNV, pero no en políticas de saloncillo, porque ni siquiera son de salón, para quitar a uno o al otro», afirmó Ortuzar en una entrevista a Herri Irratia.
Consideró que en este momento se está produciendo un fenómeno de «pelearse por quién ocupa el lugar del PNV». Y frente a ello pidió trabajar «para que más base social y más votos apoyen a opciones abertzales, para conseguir una Euskadi libre y una nación vasca, que está todavía en construcción que avance en bienestar, en desarrollo y en autogobierno».
Como ya hizo el lunes, incidió en pedir «tranquilidad y respeto» para el debate que realiza la izquierda abertzale «y que parece tan trascendental».
«Guste o no, hay un sector de la población, relevante e importante, que se identifica con esas ideas y que, por lo tanto, tiene derecho a tener representación en todas las instituciones en función de sus ideas», dijo Ortuzar. Deseó que acabe con «un desmarque de las acciones violentas» de modo que «cuanto antes se puedan sumar a la política vasca», y concluyó que «si el debate finaliza así, bienvenido será y el PNV se alegrará».
Mientras tanto, consideró que EA «está un poco descolocada hasta saber qué sucede ahí, en ese mundo». Se quejó además de que «ese polo soberanista nació con un pecado original al decir quiénes no debemos estar». GARA
El mantenimiento del apartheid contra la izquierda abertzale y que este sector político no pueda presentarse a las próximas elecciones municipales y forales de 2011 es el precio para que el PP siga manteniendo su apoyo a Patxi López.
Impedir la presencia de la izquierda abertzale en las urnas es una condición imprescindible para que PSE y PP puedan optar a extender el pacto que les une en el Parlamento de Gasteiz a las diputaciones y los ayuntamientos de las mayores ciudades. Antonio Basagoiti lo tiene claro y no consiente que nadie eche a perder su oportunidad. Así que quiere hacer responsable a Patxi López de que el independentismo no pueda presentarse tampoco a las próximas elecciones bajo la amenaza de dejarle caer como lehendakari. No importa lo que haga la propia izquierda abertzale ni lo que pudieran decir los jueces; si el PSOE quiere seguir en el Gobierno de Lakua, tiene que mantener ese apartheid.
En una entrevista concedida a una cadena ultraderechista española anteanoche, Antonio Basagoiti anunció que «es la primera vez que lo digo», pero el mantenimiento de la ilegalidad «es imprescindible para que el pacto y el acuerdo sigan vigentes». Luego insistió en que «es clave que no se les deje estar en las elecciones» municipales y forales de 2011, lo que a su entender «dependerá de la Fiscalía y del Gobierno de Zapatero». El presidente del PP de la CAV aseguró que «la prueba del algodón será lo que hagan o no frente a las listas de los asesinos de siempre».
Pero, por lo que parece, Basagoiti puede estar tranquilo de momento, puesto que Patxi López fue tajante ayer al afirmar en Madrid que «no veo cómo van a participar en las elecciones de 2011». A su juicio, hoy en día todo el mundo ha llegado ya a la conclusión de que sólo podrán hacer política quienes renuncien a la violencia y colaboren a que ETA «desaparezca definitivamente».
«Si eso no sucede, estoy convencido de que en las elecciones no va a haber presencia de ese mundo de connivencia con la violencia, y de momento nada nos hace augurar que eso sea así», defendió el lehendakari, antes de reclamar que no se especule con este tipo de asuntos y se busque una forma de conflicto «donde no la hay». GARA
Plantea sinergias electorales con la izquierda abertzale; en Nafarroa defiende NaBai pero matiza que hay que adaptarse a nuevas situaciones.
Se ha publicado que está sondeando alianzas con PSN e IUN en diversas localidades de Erribera. Su evolución ideológica le acerca a ese espacio.
Vetó a la izquierda abertzale cuando se creó Nafarroa Bai. No contempla otra opción que esta coalición.
