Noticia de última hora llegada hasta nuestra redacción. Se confirma que, en el próximo Tour, los corredores de Euskaltel-Euskadi no trabajarán para su líder, sino para los de los equipos rivales. Por poner un ejemplo, en las etapas alpinas, Igor Antón tirará de Contador y Armstrong para tratar de dejar descolgado a Samuel Sánchez. «Yo no digo nada, que luego todo se sabe», ha confesado el mánager del equipo naranja.

En los corrillos ciclistas ya se escuchan rumores sobre la compensación que recibirán los gregarios del equipo vasco a cambio de su aportación. Nadie se atreve a dar cifras, al tiempo que se especula con que pueda haber otro tipo de beneficios «en especies». La afición no se explica muy bien qué está sucediendo, y no sabe si este año tiene que ir al Pirineo con la camiseta de turno que diseñe Kukuxumuxu o tiene que llevar, por si acaso, un variado surtido de maillots y banderas para poder amoldarse a la situación según se produzcan los acontencimientos.

Cuidado. Mientras tecleamos esta impresionante exclusiva, nos comunican que Florentino Pérez ha vuelto a sacar la chequera. La última incorporación galáctica del presidente del Real Madrid es la incorporación a su grupo de asesores de Joan Gaspart, antiguo mandamás del Barça y forofo culé donde los haya. Tras los seis títulos logrados por los catalanes el pasado año, y visto cómo va éste el campeonato liguero, el millonario constructor ha decidido dar un golpe de efecto. Ya le están quitando el polvo a La Cibeles. Tampoco se descarta que, este fin de semana, a los jugadores de Athletic y Osasuna les dé por anotar en su propia portería.

¿Que no se creen nada de lo escrito hasta ahora? Vale, me han descubierto, me lo he inventado todo. Pero después de leer que Josu Jon Imaz echará una mano a Patxi López, tampoco es tan descabellado. ¿O sí? Será deformación profesional, pero pensando en el próximo Alderdi Eguna me ha venido a la cabeza el cochinillo asado que le lanzaron a Figo la primera vez que regresó al Camp Nou vestido de blanco.