Prisión incomunicada para cinco de los siete detenidos por la Ertzaintza
El juez Eloy Velasco decidió anoche llevar hasta el extremo la incomunicación, ya que envió a prisión a los cinco detenidos por la Ertzaintza en la madrugada del martes bajo esa misma medida. Previsiblemente, seguirán incomunicados hasta que comparezcan en la Audiencia Nacional española los ondarroarras que fueron detenidos el viernes: Urtza Alkorta y Zunbeltz Bedialauneta. GARA ha podido saber que uno de los encarcelados fue llevado dos veces al hospital.
G. M. |
El juez de la Audiencia Nacional española envió anoche a prisión en régimen de incomunicación a cinco de los siete detenidos por la Ertzaintza entre la madrugada del martes y el viernes en Gipuzkoa y Bizkaia. En concreto, ordenó el encarcelamiento de Ibon Iparragirre, Asier Badiola, Jon Iñaki Esnaola, Xeber Uribe y Xabier Zubizarreta, quienes permanecerán incomunicados en prisión previsiblemente hasta que comparezcan ante el juez los dos ondarroarras que aún siguen incomunicados en manos de la Ertzaintza: Urtza Alkorta y Zunbeltz Bedialauneta.
La Audiencia Nacional española ha decidido llevar hasta el límite el régimen de la incomunicación, ordenando también que en prisión sean mantenidos con esa misma medida. Así, ni los abogados ni los familiares podrán comunicarse con ellos, imposibilitando así que se conozca por ahora el trato que hayan podido recibir en manos de la Policía autonómica. Algo sobre lo que los familiares de los detenidos han venido mostrando su preocupación durante la semana, incluso ante el Ararteko el viernes, donde acudió también Urtza Alkorta y fue detenida de regreso a Ondarroa.
Los cinco vecinos de Ondarroa, Mutriku y Deba comenzaron pasadas las 10.00 de la mañana a comparecer ante el juez Eloy Velasco. Éste decidió que lo hicieron incomunicados. Y de la misma manera ordenó anoche que fuese su ingreso en prisión, acusados de llevar a cabo cinco acciones con explosivos.
Expulsado de la Audiencia
En cuanto a las acusaciones concretas, según difundieron las agencias de información españolas, Velasco acusa a Iparragirre y a Badiola de «pertenencia a organización terrorista,y de estragos y tenencia de explosivos». Por su parte, a los otros tres que comparecieron ayer -Jon Iñaki Esnaola, Xeber Uribe y Xabier Zubizarreta-, el magistrado del tribunal especial les acusa de un delito de «colaboración con banda armada». Además, y según las agencias de información, Velasco habría imputado a Zubizarreta también un delito por «tráfico de drogas».
Sobre ese extremo, y horas antes de que los vascos fuesen enviados a prisión, el consejero de Interior de Lakua, Rodolfo Ares, anunció un segundo proceso judicial «contra el comando por tráfico de drogas».
Cabe recordar que Eloy Velasco rechazó la aplicación de medidas contra los malos tratos, así como negó a abogados vascos poder representar a los detenidos en Bizkaia y Gipuzkoa. Bajo la misma lógica, el letrado de confianza de los ahora encarcelados fue expulsado ayer por la mañana de la Audiencia Nacional española, aduciendo que «allí no tenía nada que hacer». Se desconoce cuando comparecerán Alkorta y Bedialauneta.
Según ha podido saber GARA, uno de los detenidos fue llevado por dos veces a un hospital, al presentar un hematoma en el pecho. Además, este mismo detenido habría denunciado ante el juez haber sido objeto de golpes y malos tratos a manos de la Ertzaintza.
Según informó ayer el movimiento pro amnistía, el ondarroarra Estanis Etxaburu y el letrado donostiarra Jon Enparantza han sido encarcelados por mandato de la Audiencia Nacional española. Ambos se encuentran imputados en el caso por el acto de Jose Mari Sagardui, Gatza, que entre el miércoles y el viernes ha sido juzgado en el tribunal especial. Etxaburu y Enparantza anunciaron el martes su intención de no acudir al juicio, por lo que la magistrada española Ángela Murillo ordenó el miércoles su arresto.
Así, la detención de Etxaburu y Enparantza no llegó hasta el viernes. En torno a las 15.00, varios agentes de paisano de la Guardia Civil procedieron a detener al ex preso político vizcaino en Ondarroa, en el domicilio familiar. Según informó ayer el movimiento pro amnistía, Etxaburu fue dirigido directamente a la Audiencia Nacional española y el mismo viernes fue enviado a prisión.
El abogado Jon Enparantza, por su parte, fue detenido por agentes de la Policía española en Donostia, pero no fue hasta ayer por la mañana cuando compareció ante el juez del tribunal especial, quien ordenó también su ingreso en prisión. El movimiento pro amnistía denunció además que vetaron al abogado de confianza de Enparantza poder estar con él en los calabozos. GARA
