CRONICA Tercera ola de frío y nieve del invierno
La nieve genera problemas en casi toda Euskal Herria, y los «mirones» en Bilbo
Nevó, sí, pero en muchos lugares de la geografía vasca predominó la cinarra o nieve granulada. Copos gruesos y mucha ventisca. Fue la tercera ola de frío del invierno, cuarta desde diciembre. Habituales problemas en las carreteras, la nieve que sorprendió a la olvidada costa vizcaina y para colmo, hoy, mucho frío.
Zuriñe ETXEBERRIA - Joseba VIVANCO
Las previsiones apuntaban a que la cota de nieve bajaría este jueves a nivel del mar, pero ya se sabe que cota de nieve no significa que vaya a nevar; hace falta que precipite y, en principio, el frente que nos llegaba era continental y por tanto con poca carga húmeda. Pero el miércoles la alerta amarilla cambió a naranja y hasta la propia Ana Urrutia advirtió en el ``Eguraldia'' de la tarde que los modelos meteorológicos habían cambiado y las precipitaciones podían ser copiosas y nevar, sí, a nivel del mar. Los dispositivos de limpieza en la red viaria estaban listos desde la tarde anterior, pero ayer, a los ciudadanos de a pie la nieve nos volvió a pillar por sorpresa. «Me acaba de despespertar la madre y me dice bajito, bajito `edurre'!», comentaba el forero Edualditxe en la web meteorológica Meteored a eso de las 8.30.
Con el aviso justo, la nieve sorprendió, no tanto a los alaveses o navarros, pero sí a los habitantes del litoral, sobre todo el vizcaino, que suele ser el que siempre se queja. Esta vez, como se congratulaba otro forero, «nieva con mucha fuerza en Bilbao... Pasote. Tejados y algunos coches blancos ya... señores, que estamos capitulando. No puede serrrrrr». Y así fue. Esta vez el manto blanco, aunque desigual, visitó no sólo la capital bilbaina sino municipios donde no es habitual verla como Basauri, Portugalete o Sestao. La playa de Bakio o la de Gorliz se cubrieron de un manto blanco y es que como algún forero más se quejaba, «siempre parece que sólo nieva en la de La Concha».
Fue una jornada en la que la tónica la marcaron las idas y venidas de las ventiscas cargadas de nieve. «No acaba de cerrarse y ponerse a nevar en condiciones, son todo chubascos, bastante intensos algunos que cuando empiezan a hacer capa, paran y sale el sol unos minutos hasta el siguiente», lo resumía un participante en Meteored. Incluso en la zona de la Llanada alavesa, incluida Gasteiz, le costó «romper» como otras veces; más tarde lo hizo y, como describiría otro forero, «se hace de noche en Gasteizgrado».
Primeros copos
Los primeros copos sobre Euskal Herria se empezaron a dejar ver desde la medianoche. En Iruñea pero también en Elgoibar, Oiartzun, lo hacía con fuerza en Eibar y con intensidad en Gernika. Con el avanzar de la noche, truenos y rayos se dejaban escuchar en la costa vizcaina, coincidiendo con una bonita neveda sobre Bergara o una trapeada sobre Irun. En Salburua -el «barrio congelador» de Gasteiz, decía un forero-, los coches ya estaban blancos a las 2.00.
A partir de ahí, los copos, en mayor o menor intensidad se fueron generalizando por la geografía vasca. Incluso en Sopela o Mungia lo hacía pasadas las 7.00. En Lizarra, para las 10.00, ya acumulaban unos siete centímetros de nieve. En Donostia, la nieve venía y se iba. Sus playas volvían de nuevo a vestirse de blanco y los del baño matutino de cada día tampoco perdonaban. Ni siquiera los que alternaban los 30 grados de la sauna del balneario La Perla con las frías aguas del mar. Para el mediodía, buena nevada en Iruñea, también de unos 20 centímetros en Gasteiz, «paquetón» en la zona de Agurain, sorprendente nevada en Basauri... y consiguientes problemas en la red viaria vasca.
Una vez más, una de las vías que más padeció los rigores del temporal fue la N-I alavesa. Varios vehículos quedaron cruzados en esta carretera, a primeras horas, a su paso por la localidad de Burgelu, provocando kilométricas retenciones. Numerosos problemas también en la N-622 que une Altube con Gasteiz, dificultades de todo tipo en los accesos a la ciudad gasteiztarra -especialmente peligrosa fue la entrada a la ciudad y Portal de Foronda-, e inconvenientes múltiples en la AP-68.
La autopista entre Baiona y Pau también registro importantes retenciones debido a la nieve. En Gipuzkoa el neurálgico puerto de Etxegarate era el que volvió a presentar serios problemas. Otra cima crucial que dio al traste con la normal circulación de vehículos fue la de Barazar. El alto de Urkiola, por ejemplo, llegó a quedarse aislado. Los cortes técnicos en vías como la Autovía de Leitzaran o la AP-15 fueron también la nota del día.
Problemas en rutas principales a las que se sumaron numerosos incidentes en otras secundarias, lo que se tradujo en multitud de accidentes, más de una treintena en las carreteras navarras; el peor, la colisión registrada entre un turismo y un autobús de La Tafallesa en el que viajaban nueve empleados del centro de discapacitados deTasubinsa en Tafalla. Ocurrió a las 8.00 en la carretera Larraga-Berbinzana, con un saldo de cinco heridos leves.
En Hazparne, para evitar riesgos, hasta 32 autobuses escolares y públicos se quedaron sin salir a la carretera durante la mañana debido al hielo en la calzada. En Nafarroa, una veintena de rutas escolares no pudieron ser completadas.
Azkuna y los «mirones»
Pero si en Araba o Nafarroa están más acostumbrados a estas incidencias en su red viaria cada vez que nieva, a quienes sorprendió y trajo de cabeza fue a muchos vizcainos. «Nevando a mares en el centro de Bilbo», llegaba a ilustrar un forero de Meteored, seguramente del mismo centro de la villa.
Pero lo cierto es que el entorno de la capital bilbaina se convirtió en una encerrona para muchos. Nevó en las zonas altas de la ciudad, como Enekuri, Altamira o alto de Santo Domingo, y el caos se impuso de inmediato. El desbarajuste fue tal que hasta el alcalde, Iñaki Azkuna, compareció ante los medios de comunicación para dejar habituales perlas suyas como la de que «hay gente que está subiendo para ver la nieve y nos están haciendo la faena. Los `mirones' que van a ver la nieve están colapsando los accesos». Y es que en la capital vizcaina nieva todos los inviernos... Entre los años 1951 y 1960 los bilbainos vieron la nieve sobre su ciudad en 40 ocasiones; desde entonces, esos días han ido en descenso: en la década de los noventa nevó en la capital sólo 13 veces.
Caos en Gasteiz e Iruñea
Otra cosa es su vecina Gasteiz. Y aun así, como volvió a suceder ayer, muchas zonas de la ciudad volvieron a convertirse en un casos para el tráfico, a pesar de que el gobierno municipal de Patxi Lazcoz tenía cercanas las críticas por lo ocurrido el mes pasado con la última nevada y el hielo posterior.
Ante este panorama, la mesa de crisis del Plan Municipal de Nevadas estuvo reunida desde mediodía. Dos horas más tarde, el concejal de Seguridad Ciudadana, José Manuel Bully, informaba de las medidas adoptadas, decretando un dispositivo especial que entró en funcionamiento a las 16.00 y dirigido a evitar la formación de las grandes placas de hielo, ya que se preveían esta noche termómetros de hasta -6º . A las 7.00 de hoy se reanudaba el dispositivo.
El Hospital de Txagorritxu tuvo la iniciativa de crear con carácter piloto un registro ad hoc de las caídas atribuibles directamente a la nieve, entre los pasados 8 y 13 de enero. En total, en estos seis días se atendió a 184 personas sólo en este hospital por caídas debido al temporal.
Es probable que los gasteiztarras estén ya un poco hartos de este invierno. Aunque quizá más por el frío que por la nieve. Desde 1985 no se registraban temperaturas tan bajas en Gasteiz en un mes de enero como el pasado, confirmaba ayer Margarita Martín, responsable de Aemet en la CAV. ¿Y la nieve? Pues según sus propios datos, el invierno anterior se contabilizaron 20 días en los que nevó sobre Gasteiz. Pues en lo que llevamos del presente, desde el 21 de diciembre hasta ayer había nevado en la capital alavesa ¡cuatro días! Otra cosa son las jornadas en que el manto ha acompañado a sus habitantes.
En Iruñea los contratiempos no eran menos. Colapso circulatorio entre las 14.30 y las 16.00 debido a dos accidentes, a lo que se sumaba la dificultad de circular por la nieve caída. Un siniestro en la Ronda Oeste obligó a desviar el tráfico por la Avenida de Navarra, que, al igual que las principales arterias, quedaba colapsada. Un accidente en Zizur obligaba también a cortar la salida de Iruñea por Pío XII, con el consiguiente colapso circulatorio también en la zona.
Tras una mañana blanca en Euskal Herria, los pronósticos de una mejoría para la tarde se fueron cumpliendo y las precipitaciones fueron menores en general. A las 17.00, por ejemplo, había cuatro puertos alaveses cerrados para todo tipo de vehículos (Altube, Opakua, Orduña y Herrera) y uno guipuzcoano (Jaizkibel). Eso sí, desde Gasteiz un forero confirmaba que «está todo precioso y la capa sigue aumentando». Hacia las 20.00 les caía otro «nevadón». Otro forero, navarro, confirmaba los presagios: «Reseñar que las calles de Sarriguren están bastante mal por el hielo».
El peligro para esta pasada noche y las primeras horas diurnas de hoy será, precisamente, el hielo. Más que la nieve, lo que aguarda este viernes es un desplome de las temperaturas y eso que la madrugada del jueves ya hubo hasta -12º en Arangoiti, -3,3º en Iruñea o -1,5 en Tutera. Un frío y posibilidades de nieve que, de momento, nos acompañarán hasta el lunes.
También en Europa y EEUU
Este invierno tan crudo que está viviendo el hemisferio norte sigue dejándose sentir en numerosos lugares. Si hace unas fechas esos problemas se cebaban en Gran Bretaña, ahora la imagen es la que ofrece la costa este de EEUU. En lo que va de este invierno, las autoridades han registrado en Washington un total de 139,4 centímetros de nieve. En comparación, el récord del invierno entre 1898 y 1899 fue de 138,2 centímetros, según datos oficiales.
También las ciudades de Filadelfia, en Pensilvania, Wilmington, en Delaware, y Baltimore, en Maryland, están registrando los inviernos más nevados de su historia. Según la Oficina de Gestión de Personal, la tormenta ha causado una pérdida diaria de unos 100 millones de dólares por concepto de pérdida de productividad. La autoridad de aeropuertos informó de que la tormenta forzó la cancelación de más de mil vuelos en las terminales que sirven a la capital estadounidense.
Mientras, a los 16 soldados indios muertos en una avalancha, se suman 171 fallecidos en otro suceso igual, ayer, en Afganistán. En Europa, Bélgica se recupera de los 1.000 kilómetros de atascos del miércoles en sus carreteras, tras una imprevista tormenta. Y en Berlín, por ejemplo, llevan sin que la nieve se derrita desde el 29 de diciembre.
El temporal de nieve se cobró su víctima. Una mujer de 38 años falleció ayer atropellada por un turismo en Sopela, cuando intercambiaba datos con otro conductor con el que previamente había sufrido un accidente de chapa. El suceso ocurrió a las 11.15 en la carretera BI-2122. En ese mismo siniestro resultó herido un hombre de 45 años. Por otro lado, otra mujer de edad avanzada resultó herida leve al ser arrollada por una motocicleta en la confluencia entre las calles Olaguibel y Fueros, en Gasteiz. El conductor también resultó herido.
GARA
Fue una entrada Polar Fría Continental con origen en los confines siberianos y tuvo tres olas, siendo la segunda la más intensa. Se inició el día 2 de febrero y concluyó hacia el 22-23 de ese mes. Afectó a prácticamente toda Europa y significó el episodio de frío más intenso acontecido desde la Pequeña Edad Glacial que acabó hacia 1870, aproximadamente. Fue un potente chorro de aire frío que penetró por Catalunya y tardó 454 horas en cruzar la diagonal peninsular. Hubo tres oleadas de aire frío ese febrero.
Curiosamente, hasta entonces, el invierno de 1955-56 estaba resultando particularmente suave. Estos días de pleno febrero, algo más de un siglo después de aquello, la estación invernal se nos está haciendo demasiado larga y fría. Cada pocos días tenemos sobre nosotros el aviso de una nueva arremetida heladora y ya hemos perdido la cuenta de los anuncios de nieve y heladas, por no hablar de que apenas nos hemos quitado los abrigos. Pero como se comenta estos días en el blog meteorológico lagotafria.blogspot.com, «recordar eventos meteorológicos acontecidos hace muchos años es siempre un buen ejercicio de nuestra -frecuentemente traidora- memoria». Baste pensar por un momento que en aquel febrero del 56 el mercurio llegó a bajar en Donostia hasta los -12º, en Granada hasta los -8,1º, en Catalunya se registró la mínima absoluta histórica en el Estado español de -32,0º en Estany-gent, que ríos como el Támesis o el Loira se helaron, que en Barcelona se repartía cognac a los guardias urbanos, que en Estambul los lobos hambrientos llegaron hasta el mismo aeropuerto, en las zonas altas de Croacia el espesor de nieve llegó a los cuatro metros, que murieron varios cientos de personas en toda Europa...
Euskal Herria sufrió ese embate siberiano. «Ha sido hoy el día más crudo no sólo de este invierno sino de muchos inviernos. El termómetro marcaba en la capital -15ºC, y la nieve acumulada en las calles estaba completamente helada, haciendo peligrosísima al tránsito», relataban las crónicas en Iruñea. En Gipuzkoa y el noroeste navarro, la temperatura media de aquel febrero fue de hasta 8º más baja de lo normal. Algunos de los datos que nos facilita Margarita Martín, responsable de Aemet en la CAV, son escalofriantes: en Hondarribia se llegó a -13º ; en Bilbo hasta -8º; en Igeldo a -12,1º y -10º , y hubo 19 días de helada ese febrero; en Sondika bajó hasta -8º y hubo 22 días de helada en ese mes; y en Gasteiz el mercurió cayó hasta los -16,8º, con nada menos que 27 días de helada de los 29 que tuvo el mes. El observador que midió la temperatura más baja en el observatorio de Igeldo fue Alejandro Alberdi Arrillaga, el cual cuenta que era tal el hielo acumulado en la carretera de acceso que no podían entrar ni salir de él, teniendo que permanecer varios días allí.
Frío de récord y nevadas de escándalo en suelo vasco, incluidas sus capitales costeras. Así, la pregunta se antoja inevitable: ¿qué ocurriría hoy con una temporal como aquél?
J. V.
