Festival documental Punto de Vista
Un palmarés para cineastas inclasificables
Después de una semana repleta de pases y estrenos de documentales y cortometrajes, las proyecciones de la sección oficial del festival de cine documental de Iruñea se cerraron ayer. Anoche, el jurado se sentaba a deliberar cuáles de los catorce largometrajes seleccionados se llevarán los premios al mejor director y a la mejor película.
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
Las proyecciones a concurso del festival de documentales Punto de Vista de Iruñea se cerraron ayer. Queda visto para sentencia. El nombre de los ganadores se dará a conocer esta misma mañana, antes de la gala de clausura que tendrá lugar por la tarde en el Palacio del Condestable. «Tarata», una película sobre un pueblo boliviano que agoniza tras la fuga de los jóvenes en busca de un futuro mejor, y «La danza de los espíritus», en torno a los curanderos de Camerún, cerraron el ciclo de catorce largos de la sección oficial. Habrá que esperar hasta el sábado para una nueva proyección de los documentales premiados en los cines de Carlos III.
Punto de Vista -que toma su nombre del término acuñado por el realizador francés de la década de 1920, Jean Vigo- se ha mantenido fiel a su compromiso con el cine de vanguardia eligiendo obras inclasificables y raras de ver en cualquier otro festival. El tudelano Josetxo Cerdán, profesor de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona que se estrenaba este año como director del festival, ha renovado la apuesta por un «festival que sea algo más que pases de películas» aunque eso provoque que «nunca sea un festival de masas». Cerdán defiende que el festival debe mantenerse fuera del mercado: «Hay que separarlo del mercadeo televisivo. Aquí se viene a ver buen cine, no a comprar y vender» La apuesta por la radicalidad en los temas y los formatos constituye una de las principales retos para la socialización del festival en la ciudad. Apostar por directores como James Benning, con planos extremadamente largos (su película «Ruhr», que se proyectó el miércoles, tiene un plano de 60 minutos), resulta de difícil digestión para la mayor parte del público. Sin embargo, Cerdán opina que la clave se encuentra en la comunicación, en llamar a la puerta de nuevos colectivos que puedan sumarse al proyecto: «Esta idea la hemos puesto en práctica con la gran retrospectiva de Jem Cohen, realizador de videoclips y muy vinculado al mundo de la música. Promocionamos la proyección de `Instrument' en tiendas de discos y en círculos musicales. Nuestra idea es ir acercando el festival a nuevos sectores, continuar sensibilizando a nuevos públicos sobre este tipo de cine, porque confiamos en que merece la pena».
«No somos salvadores de nada ni de nadie, pero sí que defendemos que exista una diversidad de miradas. Hay que dar una oportunidad a otras formas de cine y cultivar también que la gente empiece a interesarse por ellas», manifiesta el director del festival.
Gonzalo de Pedro, director de programación, se muestra preocupado por la percepción que ha calado sobre la sección más vanguardista del festival de Iruñea, «La región central». «Hay que alejarse de la idea de que se trata de una sección árida. El cine experimental no es un muermo y para nada inaccesible», explica De Pedro. «La sección puede resultar chocante en un principio, pero la vista se educa y este año se han proyectado películas ciertamente divertidas».
De la elección de documentales se ha encargado este año un comité de cinco personas, entre las que se encuentran Cerdán y De Pedro. Además de los documentales que son enviados por los directores directamente al festival (719 trabajos en esta edición), el equipo de Punto de Vista ha rebuscado por su cuenta entre los principales certámenes del mundo. Para ello, ha contado con dos delegadas: una encargada de América (Margarita de la Vega) y otra de Asia (Asako Fujioka), que se ocuparon de rastrear en busca de candidatas al premio Punto de Vista. Elena Oroz, otra de las encargadas de la selección, explica los criterios que se han utilizado este año: «Las películas que hemos decidido proyectar tienen un compromiso con la forma. Además hemos tratado de mantener un equilibrio con la producción nacional y extranjera, apostando también por directores jóvenes». Oroz sostiene que el objetivo es, fundamentalmente, «seguir las tendencias documentales actuales, como la antropología experimental que practica Ben Russell».
deliberaciones del jurado
La gran decisión quedó ayer en manos del jurado. Ellos son los responsables de elegir el mejor largo documental de los catorce proyectados y conceder el premio Jean Vigo al mejor director. El profesor de la UPV Santos Zunzunegi, antes de sumirse en las deliberaciones con sus compañeros, resaltó «el elevado interés de las películas de este año» y destacó el hecho de que Punto de Vista se mantenga «abierto a géneros híbridos, entre documental y la ficción». Según Zunzunegi, «son otros los cines que existen aparte de Hollywood y es obligado tenerlos presentes». Los compañeros de jurado del historiador del cine son las cineastas y ensayistas Alisa Lebow y Lynne Sachs, el director de FID Marseille, Jean-Pierre Rehm, y la directora del programa «Metrópolis» de TVE, María Pillier.
Las películas sobre las que tenían que emitir veredicto anoche abarcan temáticas radicalmente distintas. «Rip in pieces América» supone una revisión novedosa de la censura en Internet, que contrasta radicalmente con un documental rodado en formato clásico de 16 mm. como «Let each one go where he may». Otras piezas son tremendamente reflexivas y personales como «Le plein pays», que narra la vida de un loco sin apenas diálogos, o «Fragments», que relata la búsqueda del origen de la familia. «Sweetgrass» destaca por la espectacularidad de los paisajes, mientras que «Cooking histories» es un hilarante repaso a la historia del siglo XX a través de cocineros militares. Entre las más impactantes se encuentra «American Alley», un drama sobrecogedor sobre inmigrantes rusas que se prostituyen en Corea del Sur.
En el apartado de cortometrajes, quizá el más duro haya sido «La oscuridad del día», una reflexión sobre las personas que se quitan la vida hilvanada a través de los fragmentos del diario de un suicida. No obstante, también resulta conmovedor el relato de «Till it hurts», de un hombre de 53 años con una madre sobreprotectora.
Primer año sin Muguiro
Pese a la marcada línea continuista se que mantiene ha habido grandes cambios. El principal de ellos es la entrada de la Fundación INAAC, creada meses antes por el Gobierno de navarro. Una de sus primeras decisiones fue sustituir al hasta entonces director de Punto de Vista, Carlos Muguiro. Un cese que fue duramente criticado desde diversos estamentos, sobre todo después de que el festival Documenta Madrid rompiera una lanza en favor del trabajo de Muguiro en su catálogo del pasado año. Desde la dirección de Punto de Vista explicaron que «el Gobierno tiene la idea de cambiar al director cada cuatro o cinco años. Eso es todo. Nadie se alegra de que ya no esté en el proyecto». Cerdán, por su parte, añade que «el trabajo de Carlos fue ejemplar. Me escribió para felicitarme por el catálogo de este año y mantenemos unas relaciones cordiales».
Con la marcha del impulsor del festival, el espíritu del festival Punto de Vista se mantiene gracias a la invitada de honor que acude todos los años. La sonriente Luce Vigo, hija del cineasta francés en cuyo nombre se entrega el premio al mejor director, llegó a Iruñea el primer día y estuvo presente en todas las sesiones desde primera hora de la mañana, a pesar de lo cansado que puede ser a su avanzada edad.
A lo largo de la semana, los directores y los invitados del festival se zambullían en la noche iruindarra en el bar Nicolette. Dominic Gagnon («Rip in pieces America») y Lluís Escartín («Amanar Tamasheq») compiten por el premio al más noctámbulo.
A pesar de que la sección oficial se dio por cerrada ayer, los ciclos «Las afinidades de Vigo» y «Signal Fires, el cine de Jem Cohen» continúan hoy en las salas. Esta tarde también es el turno del último corto y película de «La región central».
Una de las principales novedades de este año ha sido la división de la sección «Heterodocsias», que se ha desdoblado para mirar al pasado y al presente del cine documental. Cuarenta años después, «Heterodocsias Rewind» rescató ayer la película «Contactos» de Paulino Viota, restaurada hace unos meses por los museos MacBa y Reina Sofía. Santos Zunzunegi, miembro del jurado de este año, es guionista del filme. La dirección de Punto de Vista dio a Viota carta blanca para elegir dos películas más y proyectarlas antes de «Contactos». El director santanderino optó por «La invasión» (con guión de Borges) y «Jeanne Dielman» porque a su juicio «son capaces de dialogar de alguna forma» con su película. Según expuso Viota, las tres comparten en esencia el mantener «oculto el tema principal». Por otra parte,
la mirada al futuro llega de la mano Proyecto X Films de «Heterodocsias», que consiste en financiar un proyecto que se presentará al festival el año que viene. Los candidatos son Chus Domínguez, Fernando Franco y Virginia García del Pino. El nombre de la nueva sección dedicada a la financiación de proyectos rinde homenaje a la productora de cine experimental X Films del empresario navarro Juan Huarte.