El consejo de administración del Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB) fue ayer escenario del último encontronazo entre José Luis Bilbao y representantes de Lakua, que se saldó con un cruce de acusaciones entre el diputado general y el viceconsejero de Transportes, Ernesto Gasco, por no aprobar la mayoría gubernamental los presupuestos previamente pactados en una comisión técnica.

En una comparecencia a la tarde, el diputado general de Bizkaia -acompañado de los alcaldes jeltzales de Bilbo, Erandio, Getxo Leioa y Santurtzi- emplazó al lehendakari, Patxi López, a que resuelva el conflicto creado al no haberse refrendado las cuentas del CTB. José Luis Bilbao advirtió de que la repercusión de las discrepancias puede ser la paralización de las inversiones previstas en la prolongación de la línea 2 del metro al barrio santurtziarra de Kabiezes, la llegada del suburbano a Basauri en 2011 y el soterramiento del trazado de Maidagan, en Getxo.

Tras la reunión, por la mañana, Gasco dijo que los 15 representantes del PSE en el consejo, frente a los 6 jeltzales, habían rechazado las cuentas del Consorcio de Transportes por la deuda de 127 millones de euros que contemplaba, algo que aseguró no se ajustaba a la legalidad, tal y como se lo habían planteado desde el Departamento de Hacienda de Lakua.

En el cruces de reproches, en el transcurso de la reunión, ambas partes señalaron que no tendrían problemas en buscar otras fuentes de financiación para las inversiones previstas. «Hay soluciones si se quieren buscar soluciones, si se quiere buscar la bronca y que Bizkaia vaya peor, eso es cosa de cada uno», declaró después Ernesto Gasco, quien acusó al diputado general vizcaino de buscar la «confrontación» con el Gabinete López. «No se puede -añadió- jugar a ser lehendakari todos los días como quiere hacer y pretende el señor Bilbao»

Llamamiento al lehendakari

El origen de la enésima bronca protagonizada por Bilbao quedó en evidencia por la tarde, cuando el diputado general vizcaino llamó al lehendakari a que ponga «orden en sus filas» por lo que entiende es producto de «la incompetencia de los departamentos del Gobierno».

«Si entre el Departamento de Transportes y el de Hacienda del Gobierno Vasco no se hablan -comentó el político del PNV-, ése no es un problema del Consorcio. Si sabían que los límites de endeudamiento se podían o no traspasar, no es un problema del Consorcio. O es mala fe, porque el Gobierno Vasco ha decidido que el metro de Bilbao es la última prioridad dentro del marco del endeudamiento».

«Si se han enterado ahora que sólo hay 61 millones de endeudamiento (para un total previsto de 127 millones en 2010 del CTB), es incompetencia, y si han tomado la decisión de relegar al último lugar de las prioridades las obras del metro de Bilbao, eso es mala, fe y decisión política del Gobierno Vasco», manifestó José Luis Bilbao.

Tras las descalificaciones a la gestión de Lakua, se ofreció a buscar las salidas «serias y rigurosas que hagan falta». «Esto -apostilló el diputado general de Bizkaia- se arregla fácilmente si en esos 1.951 millones de euros de endeudamiento del sector público autonómico, 60 millones arriba abajo no van a ningún sitio».