Hay momentos en los que los dichos populares cobran sentido. Eso de quítate tú para ponerme yo, es algo que pasa de manera constante en la televisión. Quitan un programa para poner otro, lo único que varía es la mesa, la corbata o los tacones. En ETB-2, han suprimido «Pásalo» y han colocado «Aspaldiko», y quienes no se fijen mucho, en el primer zapeo no van a notar muchas diferencias. Es el mismo programa, con más ínfulas. Un quítate tú que eres del equipo anterior para ponerme yo, que soy opción del cambio hacia atrás que está protagonizando ETB, en general.

O al menos, esa apreciación volatinera sacamos de esta primera semana de emisión y que no hemos podido visitarlo con detenimiento, lo hemos sobrevolado y hasta en horarios de redifusión en ese cuarto canal de recopilaciones que encontramos en nuestra TDT. Un alivio para estos programas de sobremesa que o te duermes, o estás trabajando, o no apetecen. No adelanto nada, pero hemos visto a su director y conductor tan sobrado como siempre. Su proverbial verborrea pesa demasiado. Sus invitados irán midiendo sus fuerzas, pero salvando las distancias, lo presenciado y su ritmo, es muy similar a lo que sustituye. Probablemente no haya otra opción. O no hay más imaginación. O es un horario muy codificado por las competencias varias.

En Antena 3 han colocado uno de esos programas que son tan eficaces, como horrorosos en su contenido. Parece de otro tiempo televisivo, pero dejémonos de filigranas, los chistes gustan, y me da la impresión de que cuanto más malos, mejor. «El Club del chiste» es una de esas soluciones de emergencia que encuentran las cadenas para con cuatro duros cubrir un hueco, y por lo que nos dice Sofres, la jugada comercial no les ha salido mal. Lo malo es el formato, los chistes, la vulgaridad, lo que tiene de bucle con la propia historia de la televisión. Anabel Alonso lo conduce, un claro caso de una gran actriz casi siempre, o casi siempre, desaprovechada a la que se le encargan programas menores. Bien pagados, me imagino, pero pasa la vida y sigue contando chistes. Algo no cuadra. Es una opinión realizado en sobrevuelo. Por cierto, ¿qué es un sobrevuelo?