El ex director de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) y premio Nobel de la Paz en 2005, el egipcio Mohamed el Baradei llegó ayer a El Cairo dispuesto a iniciar su carrera política. En declaraciones de los últimos días, ha reclamado una «democratización» del Gobierno de Hosni Mubarak. Antes de aterrizar en la capital egipcia, reafirmó su determinación a hacer todo lo que pueda para que Egipto avance hacia la democratización y el progreso económico y social. «Deseo ser un instrumento para el cambio. Estoy dispuesto a lanzarme a la vida política con la condición de que haya elecciones libres, y el primer paso es derogar una enmienda de la Constitución», declaró al canal privado Dream.

Según esta enmienda, los candidatos independientes deben obtener el apoyo de 250 cargos electos, de los cuales, al menos 65 deben ser miembros de la Asamblea Nacional, 25 del Consejo Consultivo y 10 cargos municipales. Esta norma le excluye prácticamente debido a la hegemonía del partido gobernante.

En el aeropuerto le aguardaban entre 1.500 y 2.000 militantes de la oposición, que lo recibieron cantando el himno nacional, mientras le animaban a presentarse como candidato presidencial a las elecciones. Entre los presentes destacaban el novelista Alaa Aswani, el presentador estrella de la televisión egipcia Hamdi Kandil y un dirigente del movimiento opositor Kefaya, George Ishaq.

«Todos le pedimos que utilice su peso internacional para traer cambios reales a Egipto. Todos estaremos a su lado si se convierte en un símbolo de este cambio», subrayó Hassan Nafa, profesor de la Universidad de El Cairo y líder de una campaña en pro del cambio democrático.