El Biarritz logró una importante victoria ante un rival directo en la lucha para meterse entre los seis primeros. Ahora mismo el objetivo de los blanquirrojos es acabar la fase regular entre los seis mejores lo que les daría el billete para jugar los cuartos de final de la Liga, así como la oportunidad de disputar la Heineken Cup de la temporada que viene.

El partido fue malo, ninguno de los dos equipos ofreció un gran espectáculo. Se vio que los dos combinados tenían mucho miedo a perder y eso se reflejó en el marcador final. La labor defensiva fue más importante que la atacante. La primera parte fue mala de solemnidad. Los locales trataron de llegar a la línea de ensayo del Brive, pero los franceses se dedicaron a defender con la intención de buscar las contras, por lo que apenas hubo ocasiones para ensayar. Cada equipo sólo anotó un golpe de castigo, por lo que llegaron empatados al descanso.

En la segunda parte, los labortanos salieron con más ímpetu, pero nunca pudieron superar a la férrea defensa visitante, por lo que los puntos llegaron a través de los golpes de castigo y un drop. El Brive no demostró nada, sólo trató de defender y anotó dos golpes de castigo, aunque nunca puso en peligro la victoria del conjunto local, que está obligado a mejorar su juego si quiere conseguir el objetivo que persigue.