Crónica | Entrega de premios del torneo Gara
Las estrellas del ciclismo de mañana tienen su merecido reconocimiento
El hotel Kurutziaga de Durango fue testigo de la entrega de premios del Torneo GARA, antesala de un futuro profesional exitoso.
Arnaitz GORRITI
Hay premios que engrandecen a los premiados y galardonados que dan prestigo los galardones. Los premios GARA del ciclismo aficionado tienen la rara cualidad simbiótica de engrandecerse a sí mismos mientras dan a los ciclistas agraciados cierto caché, preludio de un futuro lleno de éxitos en el campo amateur, o incluso profesional.
En el Hotel Kurutziaga de Durango se volvió a representar el ciclo vital de un deporte que en Euskal Herria vive una continua regeneración; y tan rápida resulta que tres de los premiados, el uruguayo Fabricio Ferrari y el abulense Noel Martín, así como el oñatiarra Markel Irizar, no pudieron estar presentes. Así es el profesionalismo.
Tras quedarse con la miel en los labios el pasado año, Ferrari fue el principal premiado. El uruguayo del Caja Rural se llevó cuatro pruebas -Ororbia, Urraki, Berriatua y Elgeta-, además de la Bizkaiko Bira, que fue el impulso final para su triunfo en el Euskaldun de GARA. Tal superioridad lo llevó a pasar a categoría profesional, y como en la jornada de ayer se encontraba en la Vuelta a Andalucía, debió ser su ex director, Alejandro Hernández, quien recibiera de la mano de Koldo Fernández de Larrea el máximo galardón. Tampoco pudo estar el ganador del premio del torneo Lehendakari, Noel Martín, después de un disputado mano a mano con Gari Bravo. Fue el director de Orbea, Alex Díaz, el encargado de recibir de Javier Ruiz de Larrinaga su correspondiente galardón.
Sí acudieron los vencedores del premio al mejor debutante y a la mejor fémina. Además de mostrarse muy contentos, ambos declararon estar con ambición de cara a la presente campaña. Fue el responsable de deportes de GARA, Imanol Intziarte, quien entregó el trofeo a Pello Bilbao, mejor debutante de 2009, gracias sobre todo a una segunda parte de la temporada sobresaliente con victorias en Antzuola y Larrabetzu. «Premios como éste significan que se valora la temporada que he realizado», dijo.
Nada tiene de inexperta la mejor de 2009, Cristina Alcalde, pero casi se puede decir que también recibía el premio por su debut, ya que retomó la bicicleta tras un parón. Feliz por su éxito, la corredora del Bizkaia-Durango confesaba tener una pequeña espina clavada por no haber podido ir a los mundiales de Mendrisio. «Da un poco de pena el estar a las puertas de un Mundial, ver que estás ahí...».
Como fin de fiesta, GARA quiso dar las gracias a dos ciclistas que en el pasado Tour narraron sus experiencias en el pelotón en las páginas del periódico: Amets Txurruka y Markel Irizar. Ausente el de Oñati, fue el representante de Euskaltel-Euskadi quien, de la mano de un mito como Marino Lejarreta, recibió este galardón. El de Etxebarri declaraba que «Markel y yo colaborábamos de buen grado, porque siempre es bonito comentar lo vivido desde dentro. A pesar de la rutina, siempre surgen cosas que contar».
El posterior lunch puso el cierre a esta edición. Mañana, en Zumaia, arranca una nueva temporada amateur.