Por mucho que fuera ante el colista, el triunfo que consiguió el Arrate la semana pasada parecía abrir las puertas a una nueva etapa en la irregular trayectoria albiazul. Sólo han hecho falta ocho días y otro partido para comprobar que toca seguir sufriendo.

Lo peor es que la reacción se cortó ante un rival directo que, para más inri, se hace con el golaverage particular gracias al 32-27 que firmó ayer y que, de hecho, le permite superar al Arrate en la clasificación. El choque de la próxima semana se antoja así definitivamente vital para los eibarreses, que reciben al Alcobendas, otro que intenta huir de la quema.

Cutura intentó meter el miedo en el cuerpo a un rival que llegaba con seis derrotas consecutivas a sus espaldas inaugurando el marcador, pero el Lábaro Toledo se respuso de inmediato y consiguió mantener todo el primer tiempo igualado, cuando no con ventajas, aunque mínimas, locales.

La reanudación arrancó de manera similar, pero el Toledo mejoró su defensa para romper el partido con un parcial de 3-0. En los últimos minutos, el esfuerzo físico empezó a hacer mella en los anfitriones, que además se quedaron con dos jugadores menos sobre la cancha, pero la diferencia era ya demasiado amplia.