El fiscal general del Estado español, Cándido Conde-Pumpido, afirmó ayer que la Fiscalía de la Audiencia Nacional «impulsará hasta el final» la causa abierta por el juez Eloy Velasco en la que acusa a Venezuela de alentar una supuesta colaboración entre ETA y las FARC.

«La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha apoyado desde el principio el procedimiento en el que a partir del ordenador ocupado a Reyes se obtuvieron indicios de la colaboración entre dos grupos terroristas», indicó Conde-Pumpido.

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, volvió a referirse a las acusaciones y dijo que «es una respuesta orquestada desde Washington y Madrid» por la creación de la Comunidad de Estados Americanos y del Caribe (CELAC). «Eso no le gusta al nuevo imperio (EEUU) ni al viejo imperio (España)», declaró.

El auto del tribunal especial fue tratado en el Parlamento venezolano, donde debatieron una declaración de rechazo. El diputado Roy Daza dijo que las acusaciones son «irresponsables» y que el juez debería pedir explicaciones a Felipe González, que suscribió el acuerdo con Venezuela para que acogiera a refugiados políticos vascos.

Por su parte, el PP criticó la «chulería» y el «desplante» mostrado por Chávez cuando ironizó sobre las acusaciones diciendo que Simón Bolibar también habría sido calificado como «terrorista» por la Audiencia Nacional.

Askapena aplaude a Chávez

Desde el colectivo internacionalista vasco Askapena mostraron su alegría por la respuesta de Hugo Chávez a Madrid y resaltaron que se ha situado «en el punto de mira del imperialismo sin amilanarse».