La vicepresidenta segunda del Gobierno español, Elena Salgado, compareció ayer en la Comisión de Economía del Congreso para detallar las razones que «impedían» la firma inmediata del convenio que fije plazos y presupuestos para el «corredor navarro» del TAV.

Salgado aseguró que «la restricción del presupuesto» del Ministerio que dirige José Blanco ha obligado a «algún pequeño ajuste temporal». «Es únicamente la cuestión que se está debatiendo y con toda seguridad llegaremos a un acuerdo que plasmará en un convenio que se firme antes del 31 de marzo», según manifestó. Aunque todavía no cuentan con el convenio que regule los presupuestos y los plazos de la obra, el ministro español de Fomento anunció en noviembre un adelanto de la licitación de las obras que, según indicó, «se van a ejecutar este año».

El diputado navarro Carlos Salvador agradeció el anuncio de Salgado y recordó que Nafarroa «va a hacer un esfuerzo» por financiar la obra y que éste «debe ser correspondido con la voluntad política» del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

Asimismo, el diputado navarro precisó que el retraso en la firma de un acuerdo que lleva años siendo inminente «no ha tenido una justificación técnica o económica para que no se llevara a efecto».

Por otro lado, la Comisión de Movilidad y Ordenación del Territorio de las Juntas Generales de Gipuzkoa aprobó ayer una propuesta de resolución urgente en la que se solicita la creación de mesas interinstitucionales con el objetivo de «paliar las afecciones que puedan crear las obras del Tren de Alta Velocidad en el territorio histórico». La propuesta se aprobó con los votos a favor de Hamaikabat, Aralar -el grupo proponente-, EB, y PNV. El PP, por su parte, se abstuvo y PSE votó en contra.

Moción para paliar afecciones

En la Comisión, la portavoz del grupo juntero de Aralar, Rebeka Ubera, recordó la situación que están viviendo los habitantes de Aramaio después de que las obras del TAV provocaran un desprendimiento a finales de enero que ha provocado el cierre de la carretera que une la comarca con Arrasate. Los ciudadanos afectados «tienen una sensación de impotencia increíble» debido a que «desconocen a qué institución acudir para solucionar los problemas causados por las obras de esta infraestructura», señaló Ubera.

En consecuencia, Ubera propuso a los grupos constituir una mesa en la que ayuntamientos, Diputación de Gipuzkoa, Gobierno de Lakua, Fomento y Adif «den explicaciones a los afectados e intenten solucionar los contratiempos que puedan ocurrir» a lo largo del proceso de construcción y una vez terminada la intervención. Por su parte, PSE rechazó la creación de un órgano que «es poco operativo que no solventaría los problemas de los ciudadanos».

Alumnos de la ikastola Andra Mari, de Etxarri Aranatz, y Paz de Ziganda, de Atarrabia, que ha tomado el relevo en la organización del Nafarroa Oinez, realizaron ayer una plantación de árboles en Arbizu para impulsar el Oinez Basoa. Además de mejorar el medio ambiente, esta peculiar iniciativa servirá para recaudar fondos para el euskara.