El Tribunal correccional de Baiona hizo pública ayer la sentencia contra los tres jóvenes acusados de robar, el 11 de noviembre pasado, una bandera del monumento a los muertos de Uztaritze.

Andoni Anetas, Aintza Zufiaurre y Antton Rouget han sido condenados a un mes de prisión sin obligación de cumplimiento y a una multa de 300 euros. Aunque sólo los dos últimos reconocieron su participación en los hechos, el juez declaró culpables a los tres.

Zufiaurre y Rouget fueron detenidos el mismo 11 de noviembre, fiesta del armisticio de la 1ª Guerra Mundial, por un dispositivo de la Gendarmería apostado para vigilar la zona al haberse dado hechos similares de desaparición de la enseña francesa anteriormente. Anetas, por su parte, fue arrestado al día siguiente en su domicilio.

Acusados de «robo de bandera francesa en grupo», el juez les propuso como pena realizar un «cursillo de ciudadanía», proposición que los tres rechazaron por estimar que «iba en contra de sus convicciones» por lo que el caso llegó a juicio. Este se celebró el pasado 16 de frebrero y el fiscal solicitó una pena de dos meses de cárcel y una multa de 500 euros para cada uno.

Por su parte, el presidente de la Unión de antiguos combatientes de Uztaritze, Jean Tanneau, reclamó un euro simbólico como condena y 500 euros para los gastos de juicio.

Dinámica de denuncia

Coincidiendo con la lectura de la sentencia, Segi convocó una concentración ante el tribunal. La organización juvenil recordó que la retirada de banderas francesas entra dentro de una dinámica de denuncia de la «tentativa de asimilación» de Euskal Herria por parte del Estado francés.

Tras señalar que «no admiten la condena» apeló a la juventud vasca a «seguir retirando los símbolos franceses mientras sigan siendo la manifestación de la opresión y dominación» del Estado.